00| Sorpresa.

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Desearía tener respuesta para cada una de las preguntas que pasean por mi mente. Pero no es así. Ojalá nos dieran la oportunidad de escapar a un mundo alternativo, cómo Alicia en el país de las maravillas. Dónde no te tienes que preocupar por otra cosa que escapar de una bruja con gigante cabeza.
La realidad es horrible, y más aterradora.
—¿Cómo sigues? —me preguntó mi abuela, la cual llevaba varios minutos viéndome totalmente en silencio.
—Bien.
Conteste sin voltear a verla.
—Nisiquiera desayunaste, tampoco quisiste almorzar. ¿Estás bien?
—Estoy bien. —insistí sin mover la vista del cuaderno dónde hacía garabatos con un bolígrafo.
—Seshat, cariño…—suspiró—. Tú abuelo y yo estubimos hablando y creemos que necesitas salir, distraerte.
Mi nombre es Seshat. En la mitología egipcia era una diosa. Creían que Seshat era una experta en el arte de avistar estrellas y planetas. No me hace justia.
—No tengo contacto con ninguno de mis antigüos amigos, seguro ellos me han olvidado.
—Nunca me agradó ninguna de tus amistades. —comentó.
Se acercó y puso la palma de su mano sobre mi hombro.
—Te enviaremos a Oregón. —me dijo segura—. El destinó es una sorpresa, pero se que te gustará.
—Abuela…
—Ya se decidió, pagamos el boleto de avión, no puedes decir que no.
No me dio tiempo de decir algo más, salió corriendo de la habitación.
Habían pasado meses, sola entre 4 paredes llorando un adiós que yo no estaba lista para dar. Tenían razón, necesitaba salir y distraerme.
Olvidar el dolor.
Y el misterio de no saber a dónde vas, lo hace más interesante.

Inefable.

Inefable | Britain Dalton Where stories live. Discover now