ᴍᴀꜱᴛᴇʀᴍɪɴᴅꜱ

23.

Cuando Changbin volvió a su oficina se sorprendió al ver al mayor recostado en uno de los sillones. En completo silencio, se acercó a él para observarlo con más detalle.

Este idiota debe estar agotado.

Pensó, hasta que una fuerte mano tomó su brazo y lo hiciera caer sobre él.

- " ¡Ahg idiota! ¿Qué demonios haces?" Reclamó el menor al quedar sobre su torso. El contrario se veía totalmente cómodo, seguía con sus ojos cerrados. Estiró más sus brazos para poder abrazar mejor a Changbin.

- " Mm.. mi Binnie.." Susurró apoyando su cabeza en el torso del contrario.

- " Ya te he dicho que no soy un osito para dormir.." Se quejó el menor intentando levantarse.

- " Conejito suavecito.." Comentó moviendo su rostro para quedar entre sus pectorales, poniendo sus manos a sus lados para apretar su rostro entre ellos.

Amaba demasiado los pectorales de Changbin.

- " ¡Ya! ¡No me apretes así! Dios, Bang." Reclamó el avergonzado bajito quitando sus manos. El mayor frunció el ceño volviendo a recostarse.

- " Mmh.."

- " Ya dormiste lo suficiente, vamos a comer algo y luego puedes continuar. ¿Okay?" Propuso el menor buscando su mirada pero el mayor mantenía los ojos cerrados.

- " Mm.. no quiero.." Se limitó a decir volteandose.

Es un maldito niño.

Changbin cruzó los brazos.

- " Bangchan, cena y luego ve a dormir." Indicó con seriedad.
El nombrado se sentó para verlo aún con el ceño fruncido. Le dedicó un vistazo antes de volver a rodearlo con sus brazos.

- " Hmm... ¿Puedo comerte a ti?" Cuestionó pasando sus labios por sus hombros dando leves mordidas.

- " ¡Ya! ¡Hey! ¡No me muerdas Bang! ¡Y-ya deja eso- "
Decía Bin con risas sin embargo la intensidad de las mordidas del mayor fueron aumentando por lo que tuvo que volver a reclamar.

- " De verdad que eres un maldito animal.
Quieto, quieto." Reclamó tomando su rostro. El chico de labios húmedos se le quedó mirando con una expresión enojada.

- " Suficiente, vamos a comer." Terminó de decir Changbin levantándose. Bangchan dejó escapar un largo bostezo.

- " Bien.. Bien.. te alcanzo en un segundo.." Dijo el mayor frotándose los ojos.

Hoy había quedado sumamente cansado y con Changbin es con el único que se puede mostrar así. Este último dejó un tierno beso en su frente antes de salir.

Bangchan se levantó luego de unos minutos para lavar su rostro e ir tras él.

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El par de rubios habían estado entrenando en la sala que los mayores habían designado como una especie de "campo de tiro"
Por obvias razones, era una de las habitaciones con más seguridad del establecimiento.

Felix le había estado enseñando a Hyunjin como apuntar de la mejor manera. A pesar de su actitud infantil, el chico de pecas se tomaba muy en serio esta parte de su trabajo por lo que daba instrucciones concisas y directas.

Alzó su mano para llamar la atención del alto chico, quién se sacó los audífonos de seguridad para escucharlo.

- " Sabes, tienes buena puntería. ¿Habías hecho esto antes?"