Fénix Negro es una de las dos Órdenes militares del reino de Thrin Theras, se encuentra por debajo de Neo Génesis en la escala elitista, convirtiéndose en una llamada "Orden sub élite". Su misión es la de mantener la seguridad de la población en las distintas ciudades que conforman el territorio theriano. Por Decreto Real, sus funciones no pueden ir más allá de ello, impidiendo su intervención en operaciones de seguridad de nivel crítico, como lo es la lucha que el reino debe afrontar en contra de Safiot, la organización de asesinos más temida del continente, o la constante amenaza que representan las apariciones espontáneas de espectros.
Sin embargo, existe una línea de excepción en el decreto... la Orden solo puede tomar parte en operaciones similares a la de defensa territorial, en caso que la institución sea directamente afectada por un acto criminal.
Recientemente, ocurrió algo que fue interpretado de esta manera, uno de los cinco pilares negros, fue destruido.
Los Pilares Negros, son las denominaciones que reciben los cuarteles militares más importantes de la Orden, los cuales son comandados por oficiales de alto rango, conocidos como los Cinco Elementos.
Dobre "del aire", es uno de estos oficiales, quien fue muerto en este ataque reciente. Un sobreviviente de aquel día, pudo dar información relevante sobre los causantes del "atentado".
"Un hombre de cabellera turquesa y una infante de cabellera negra y coletas"
Los rostros de estas dos personas, Milo y Aiko, comenzaron a circular en la capital, pues en Fénix Negro estaban buscando atraparlos a como diera lugar.
Los hermanos Van Ewen: Alexei y Jayla, en una misteriosa decisión, ofrecieron ayudar al grupo de Hana, por lo que tanto ella como Ireth y Aiko, fueron integradas a la Escuela de Adiestramiento de Neo Génesis, en el tiempo que durase la sed de venganza de la Sub Élite del reino, que los había llevado a bloquear todas las salidas de la ciudad, así como los puntos de salto.
Al mismo tiempo, Milo fue requerido por Jayla para la realización de una operación especial, que ciertamente fue algo "especial".
Desde entonces había transcurrido casi un mes, hasta el momento en que las tres jóvenes recibieron una noticia que no habían esperado.
- ¿C-Cómo que expulsadas?
- Se han detectado graves irregularidades en sus documentaciones de ingreso, solo eso les puedo decir -contestó el hombre que las había estado esperando en aquella oficina.
- ¿Irregularidades? D-Debe haber un error, nosotras...
- No hay ningún error, pero no tengo autorización para decir más, es un caso que maneja Neo Génesis, y por medio de ellos se enterarán de todo lo que ha sucedido y va a suceder con ustedes -el hombre caminó hasta llegar a la puerta. - Solo tenía la tarea de ponerles en conocimiento de esto -dijo mientras abría la puerta, invitándolas a salir-, mañana a primera hora vendrán por ustedes, asegúrense de alistar todas sus cosas, ya que una vez que salgan, no volverán a entrar. Eso es todo, señoritas, ya se pueden retirar.
Hana volteó la mirada hacia sus compañeras, buscando alguna respuesta, pero lo único que notó en ellas fue la misma confusión suya.
La joven regresó la mirada al frente, y sin responder nada, optó por aceptar la invitación del hombre de traje. Al mismo tiempo, Ireth y Aiko se pusieron de pie, y fueron tras ella.
Aquella noche, en el silencio de su habitación, Hana meditaba, recostada en su cama y con la mirada hacia el techo, sobre la situación que estaban pasando. La expulsión era un escenario que no había pasado por su cabeza en ningún momento.
