Veintiocho

437 24 7
                                    

Emilia

Emilia- juro que matare a ese niño con mis propias manos - dije subiendo al auto de mi novio quien reia - ¿de que te ríes?

Pedri- de que amo como te vuelves una niña cuando estás con el, me siento el adulto y que debo cuidarte

Emilia- no sé si eso sea un cumplido o una ofensa

Pedri- un cumplido claro - beso mi mano - ¿ahora a donde vamos?

Emilia- pues a comprar algo de cenar y a nuestro lugar feliz a ver juntos el atardecer

Pedri- sus deseos son órdenes

Pedri y yo pasamos la tarde en el mirador al que solíamos ir en repetidas ocasiones a mirar la puesta de sol, el único lugar donde podríamos estar sin que nadie más nos observara.
Volvimos a casa de Pedri unas 3 horas después, el plan era todos dormir ahí, desayunar juntos y por la mañana dejar a Aitana con sus padres antes de irnos a entrenar.

Pedri- ¿estarán haciéndolo? - dijo estacionando el auto

Emilia- lo dudo - dije soltando una carcajada

Pedri- ¿por que lo dices?

Emilia- por que es Gavi, es más te apuesto una semana sin sexo a que Gavi lo arruina por completo

Pedri- acepto, pero si no lo arruina me debes una semana de sexos donde yo quiera y como yo quiera

Emilia- mmm - lo pensé - acepto pero con una condición, en el trabajo no es opción

Pedri_ de acuerdo, aceptó - estiro su mano y yo la apreté cerrando el trato

Al entrar a casa Gavi nos dio el susto de la vida pero aún así disfruté verlo en pánico, juro que parecía como si quisiera llorar por que él muy niñato no sabía ni qué hacer, Pedri quien imagino no quería pasar una semana sin sexo lo motivo y Gavi subió a la habitación como si de verdad fuera a hacerlo.

Emilia- sigo dudando que lo haga

Pedri- pues, mañana lo sabremos

Pedri y yo nos dirigimos a la habitación de este, veíamos la tv acurrucados y empiernados cuando un rudo raro comenzó a sonar, Pedri y yo nos miramos uno al otro algo comfundidos

Emilia- ¿de donde viene eso?

Pedri estaba por levantarse de la cama para ir a ver cuando terminamos de entender que sucedía con un

- Oh si - de la que claro era la voz de Aitana

Pedri y yo nos miramos con cara de asombro y claro que queríamos reír, digo siempre es gracioso oír ruidos asexuales

Pedri- gane - dijo con su mayor sonrisa - te dije que lo lograría - comenzó a reír y se tiró en la cama de nuevo - Gavi jamás decepciona bebé, es un campeón dentro y fuera de la cancha como yo - decía el engreído - deberíamos comenzar con la paga de la apuesta - se acercó a mis labios

Pedri y yo comenzábamos a besarnos, amaba los labios de mi novio de verdad que seguía sorprendiéndome lo bueno que era befando, estábamos comenzando a subir la intensidad cuando los ruidos sexuales de la otra habitación comenzaron a aumentar

Emilia- ok - nos separamos y nos miramos - eso es excesivo

Pedri- tú amiga grita mucho ¿no estará fingiendo?

Emilia- quizá lo quiere motivar - reí

Pedri- es incómodo hacerlo escuchando los gemidos de mi amigo y tu amiga ¿no crees?

Solo un número Where stories live. Discover now