CLOVER LOVE (Yuno x Oc) - Black Clover

Clover Love 015

— Aléjese de Shamyra, señora

Esas palabras hicieron enojar a la enemiga. No era la primera, sino la segunda persona que la llamaba así. 

— ¡Shamy! ¿Estas bien? — el pelinegro  se arrodilló junto a la chica y la tomó entre sus brazos, a diferencia de las demás personas que cayeron en la maldición ella aún se conservaba joven ¿Porqué? 

Porque este hechizo drena el maná, algo que Shamyra tiene demasiado, por lo que siguió absorbiendo del que tenía sellado evitando un desgaste fisiológico. 

— Yu-Yuno... — la albina se encontraba un poco débil por el reciente robo de maná

— Perdón por llegar tarde — ella negó

— ¡¡¿Cómo te atreves...cómo te atreves a llamarme señora?!! Magia de maldición de Ceniza — y al igual que con la princesa le arrojó varias esferas con maldiciones

Yuno tomó a la princesa en brazos y esquivo los ataques, se alejó hasta un callejón y dejó ahí a la muchacha para que detrás de él los niños llegaran envueltos en una corriente de aire.

— Por favor cuida de ella — le pidió al niño

—Si señor, cuidaré de la señorita

Dejando a la chica en ese lugar volvió para luchar contra la mujer. La derrotaría, para proteger al Reino y a Shamyra.

⟥────────✤────────⟤

Había recibido varias de la maldiciones, y cada vez se movía más despacio, no podía ver bien y estaba perdiendo la sensibilidad del cuerpo. Recordaba lo que muchos le habían dicho antes. 

«Aunque tenga el trébol de cuatro hojas solo es un plebeyo»

«Su talento no está al nivel de Amanecer Dorado, pronto quedara relegado al olvido»

Pero eso no era lo que frustraba a Yuno; la mujer siguió atacando, el pelinegro seguía reflexionando; algo que la mujer no tomó en cuenta fue que al quitarle los sentidos al caballero mágico le permitió sentir el flujo del maná y de esta manera despertar al espíritu del viento para así derrotar a la maga enemiga.

El agotamiento del combate hizo que el muchacho de ojos ámbar se agotara, perdió el control por un momento lo que ocasionó que se tambaleará.

Shamyra se había recuperado. Al verlo en ese estado, no dudo en elevarse hacia él.

— Buen trabajo Yuno — le felicitó la albina y pasó su brazo por su cuello — Lamento no haber sido de ayuda

—No digas eso, yo tampoco pude con ella; sino hubiera sido por...— giró su rostro para ver al pequeño espíritu que flotaba a su lado — Debemos capturarla y entregarla a los magos

— Vamos juntos

Ayudándose mutuamente se dirigieron a Kkika, la ciudad del castillo, el pelinegro se encontraba agotado por lo que descendieron a un tejado

— Quédate aquí, logré recuperar algo de maná gracias a ti, así que yo me encargaré de capturarla — él asintió aunque no muy convencido de dejarle ir sola

Shamyra retomó su camino a la torre donde se había estrellado la mujer, pero antes de que llegará fue testigo de como la bruja fue lanzada de nuevo en dirección contraria, en ese lugar había alguien que se hizo cargo, cambió de rumbo otra vez y la encontró tirada en el suelo, a diferencia de antes ahora su apariencia era la de alguien mayor, en ese instante las nubes de ceniza se desprendieron de su cuerpo y se dirigieron a las personas a las que antes les arrebató el maná, incluyendo a la princesa.