Solo Tu... //Pokefilia

Capitulo 2

- Okay Yonatan, no te pongas nervioso. Es solo arrojar la pokeball y ya. No es nada de otro mundo - se dijo Yonatan a el mismo.

Ahora mismo estoy con la pokeball del pokemon de compañía que me dio el Dr. Ziro.

Y por qué estoy tan nervioso?.

Lo que pasa es que ayer, cuando decidí entrar entrar en el programa de pokemon de compañía, el Dr. Ziro me llevó a un especie de laboratorio donde habían varias pokeballs. Él tomó una al azar y me la dio. Me dijo "Ahí está tu pokemon" y me sacó de manera apresurada del lugar, me llevó hasta la salida del hospital. Él se paró frente a mí y me dijo "bien Yonatan, ya tienes a tu pokemon de compañía. Desde ahora no hace falta que vengas todos los días, sino una vez al mes y quiero que me cuentes todo lo que hagas con él, okay?. Nos vemos el mes que viene". Y me cerró la puerta en la cara.

Eso pasó ayer. Y ahora ni siquiera sé qué pokemon es el que me dio. También estoy nervioso de como reaccione cuando vea el cuchitril en el que vivo o mi aspecto.

Okay, solo calmate Yona. Lo demás no importa.

Si no recuerdo mal es macho porque el Dr. Ziro lo llamó " él".

Bien, aquí vamos - Sal! - dije arrojando la pokeball en el aire.

Un destello rojo salió de ella y se formó una figura algo pequeña. Era un espeon.

- Hola, me llamo Serena y desde hoy seré tu pokemon de compañía! Tú como te llamas? - me dijo el, o mejor dicho "la" pokemon alegremente con una voz peculiarmente aguda.

Y ahora estoy entrando en pánico porque no sé cómo presentarme. Primero digo mi nombre y luego hola o primero saludo y después digo mi nombre, tal vez deba hacerlo como ella y primero saludar. Pero y si ella piensa que la intento imitar y se enoja o no le gusta como saludo. Como rayos me presento?!.

- hey, te encuentras bien? - me dijo la pokemon.

- eh? Si! Yonatan me llamo hola! - le dije de manera espontánea.

- oh okay, Yonatan? -

- si, ese es mi nombre - estoy temblando de nervios.

- bien Yonatan, supongo que el Dr. Ziro te explico como va todo esto del pokemon de compañía - mencionó sonriente

- en realidad solo me dijo que me tienes que hacer compañía pero no me especifico que es lo que haces -

- pues no mucho. Además de compañía se supone que debo de ayudarte con tus tareas del hogar y ese tipo de cosas -

- oh pues no hay mucho en lo que me puedas ayudar - dije mientras me sentaba sobre una torre de ropa sucia.

Ella se paró firme y miró directo a mis ojos con el ceño fruncido- no te hagas el gracioso y comienza a juntar tu basura antes que me enoje - toda su apariencia alegre y sonriente cambió de la nada a una sombría y aterradora.

- c-claro - antes estaba nervioso, ahora estoy nervioso y con miedo.

- gracias, si limpiamos los dos será más rápido - y ahora volvió a sonreír como si nada, que le pasa a esta?.

---UN RATO DESPUÉS---

Ya han pasado poco más de 30 minutos y lo único que estuvimos haciendo hasta ahora es limpiar y barrer. ¡Quiero un descanso!.

- oye espe-Serena, podríamos t-tomar un descanso? - no puedo ni hablar bien.

- descanso? Apenas vamos media hora y quieres un descanso? -

- es que necesito ir al baño - en realidad no.

- bien. Qué te parece un descanso de... 2 minutos - lo dijo con un tono malicioso.

- solo 2 minutos?! -

- sip, asi que apresurate porque solo te queda 1 minuto 36 -

En momentos así caminar ni siquiera es una opción.

Corri lo mas rapido que pude, subí las escaleras de a 3 escalones, casi no la cuento... Pero no me importó, yo seguí corriendo hasta que llegué al baño y me encerré ahí.

Me senté en el retrete y solo descansé. Tal vez no he pasado tanto tiempo limpiando como para estar cansado pero estoy acostumbrado a ni siquiera limpiar.

Así que voy a disfrutar los segundos que me quedan. Y hacer cualquier otra cosa mientras espero... Voy a leer como se hace el shampoo... Otra vez.

- oye ya termino el descanso - Serena interrumpió mis pensamientos entrando al baño.

- ¡Oye, oye! ¡¿Q-qué te pasa? No entres al baño sin tocar! -

- ¿Qué pasa? Te asusta estar encerrado con una hembra? - dijo con una sonrisa burlona.

- no se que tr-ratas de decir con eso pero por favor sal ya! - me está acorralando contra la pared.

- Y qué pasa si me acerco más a ti? - Y como ella dijo, se está acercando más y más...

- Espera, espera, ya detente! ¡AH! -

Mientras retrocedía no presté atención a mi entorno y pisé un pequeño charco de agua, me resbalé y caí de espaldas al piso - Hay que dolor... - quejándome de la caída no me di cuenta de que Serena se estaba subiendo sobre mi hasta que se sentó sobre... mi entrepierna.

- Hey, te encuentras bien? - dijo con un tono desinteresado.

- ... - ¿qué hago?

Si digo que estoy bien tendré que seguir limpiando y no quiero limpiar ni un segundo más, si digo que no estoy bien, tal vez me obligue ir a que me vea un médico y tampoco quiero salir de casa, y además de eso, si hago algun movimiento erróneo podría quedar como un pervertido.

Así que vuelvo con mi pregunta... ¿qué hago?.