Solo Lionel conoce la verdad...

Una larga noche

—Sigues desobedeciendo una y otra vez, tuve paciencia pero ya nomás, ahora me rogaras para que te deje correrte.

Sin previo aviso tome su miembro y comencé estimularlo mientras el vibrador estaba en la potencia 2 en su parte trasera, al parecer está vez le quedó claro que no debía gemir pero vaya que le estaba costando y yo lo estaba disfrutando.

—mgh...por favor espera, siento que me voy a correr.

Tape la punta de su pene para que ningún liquido blanco saliera por ahí, Guillermo seguía conteniendo sus gemidos, al parecer está vez si entendió la indicación.

—Buen chico, si sigues así tal vez considere la idea de que te vengas aunque sea una sola vez, pero yo no me eh corrido ni una vez me gustaría que me ayudarás.

Sin más volte a Guillermo para que me viera de frente, sus ojos estaban cristalinos como si estuviese a punto de llorar, su labio inferior estaba rojo de tanto que lo había mordido, los chupetones relucian en su cuello, sus chinos estaban algo mojados por el sudor, estaba sonrojado y esto era como ver una obra de arte en carne y hueso.

Le acerque mi miembro a su boca y como si se tratase de una orden comenzó a lamberlo, no tardaron muchos segundos para que me viniera  y sin pensarlo dos veces se lo trago, mientras se relambia los labios para provocarme apreté el botón 3 del vibrador y la expresión que puso hizo que se me parara de vuelta.

Salí de la habitación por un condón ya que no había ninguno en la habitación.

Narración por parte de Ochoa

Vi como Líonel salí de la habitación, intentaba pensar en algo pero no podía toda mi concentración estaba dirijida a mi parte de abajo donde el vibrador aún seguía sacándome gemidos, quería correrme pero sabía que en el BDSM no podía desobedecer y si eyaculaba sin permiso estaría dándole la contraria a mi amo, dios que vergüenza decirle así pero también me gustaba y no se porque, muchas preguntas del porque me gustaba todo esto me estaban consumiendo.

Entro mi novio con un condón en la mano, al fin de lo bueno íbamos a pasar a lo mejor.

—ugh...amo déjame correrme por favor.

No me respondió nada y comenzó a abrir el condón para posteriormente colocarselo, me estaba volviendo loco.

Se acercó a mi y empezó a restregar su miembro con mi entrada, quería que lo metiera ya pero el vibrador seguía dentro, vi como lo retiraba y suspiré ya no sentía nada dentro, eso me hacía sentir vacío.

—Por favor mételo

—¿Dónde quieres que te lo meta? muéstrame para saberlo.

Esto iba a ser vergonzoso y exitante a la vez, no sabía ni como sentirme al respecto pero mi dignidad estaba quedando de lado en este momento.

Abrí mis piernas lo más que pude dejando ver el lugar en donde quería sentirlo a él y solo a él, sonrió de lado y de una sola embestida metió todo su pene mientras me susurraba que podía correrme.

—Vaya, ¿Eso no es mucho semen cariño?

Okey, el comentario me indigno un poco pero no importaba me encantaba sentirlo dentro de mi y también me había llamado con los apodos lindos de siempre ya no estaba molesto eso me alegraba.

Narración por parte de Líonel

Me detuve un momento antes de moverme, note que Ochoa comenzaba a llorar, le retire sus lágrimas con mi pulgar.

—No llores lindo, porque te vez tan sexi así que si continuas llorando no podré contenerme.

Le deposite un pequeño beso en sus labios antes de continuar con las embestidas, esto se sentía tan jodidamente bien y al parecer el lo disfrutaba igual, pero había un pequeño detalle, seguía evitando soltar gemidos que lindo.

—Cariño ya puedes gemir, me encanta que lo hagas, me encantan tus gemidos son como una melodía tan jodidamente ardiente.

Seguí embistiendolo hasta que llegue a mi límite al igual que el y nos corrimos al mismo tiempo saque mi miembro y el condón usado, le hize un nudo y luego lo tiré.

—¿Ya hemos terminado?

Ochoa hablo en casi un susurro mientras suspiraba, tal vez fue mucha actividad sexual para el.

—No, apenas comenzamos.

Le quite las esposas para luego quitarle la camisa, sus muñecas estaban rojizas eso se volvería un moretón no había duda pero también sería prueba de lo que hicimos está noche.

—Puedes fingir ser rudo afuera cariño pero aquí dentro te tengo suplicando.

Le di un beso en el cachete.

Luego hablaría sobre la actitud que tenía Ochoa conmigo cuando nos encontramos en público pero por ahora disfrutaría de esto, la noche sería larga pero me gustaría que fuese eterna.

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¡Acabamos!
Perdonen que no publique este CAP ayer, tuve problemas.

¡Espero lo hayan disfrutado!