Solo Lionel conoce la verdad...

¡La cena con los chicos!

-¿Ya nos vamos?-pregunto un Ochoa algo desesperado- ¡amor apúrate llevas desde las 6 arreglando te y ya son las 7:30!

-Que desesperado eres-Messi bajaba por las escaleras-pense que no querías ir.

-Si no quiero ir, pero ya le prometí a mis amigos que iría y están muy emocionados.

Lionel agarro de la mano a Guillermo y juntos se fueron hacia la salida, esperemos que el argentino al fin pueda descubrir porque el comportamiento de su novio era así.

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-¡Hola pibes!

-¡Que onda Messi!-respondio Javier muy animado mientras le extendía la mano para saludarlo "cordialmente"-

-Conmigo no tienes que hacer eso-

le dedico una sonrisa viendo la ocurrencia del mexicano y le dio un fuerte abrazo al mismo, haciendo que inmediatamente un Ochoa molesto-celoso los separara.

-Venimos aquí para comer no para dar muestras de amor.

-No seas amargado Ochoa, ¡ven Messi a mi abrázame también!-Guardado aprovechaba la oportunidad-

-¡No, si siguen abrazando a mi novio me los voy a madrear!

Todos lo voltearon a ver sorprendidos hace mucho que Guillermo no decía ninguna grosería pero Messi ni se inmutó el era el verdadero memo que conocía y su novio avergonzado por lo que dijo se tapo rápidamente la boca y un notorio sonrojo apareció en su cara.

-¿Nos vas a invitar a todos de comer?, Somos muchos y no queremos estar de aprovechados.

-No se preocupen, tengo bastante dinero, por algo soy la estrella del fútbol ¿No?

Todos rieron y se adelantaron a apartar una mesa, Messi le dedicaba una mirada de desaprobación a Guillermo por lo que había dicho anteriormente, lo quería molestar y lo estaba logrando, el mexicano se dirijio enfadado a dónde se encontraban sus compañeros de equipo y Lionel desde lejos los observaba no había duda los mexicanos eran un completo desmadre.

Después de pagar la cuenta, ya que era un buffet, fue con su novio el cuál se encontraba agarrando algún aperitivo.

-¿Te gusta la comida?

-Nose, apenas probé un pan, pero si está rico.

-Es un exagerado, claro que le encanta la comida, aunque la comida este del asco este gordo se la traga-Javier estaba molestando a Guillermo el cuál le dedicaba una mirada donde le decía que quería matarlo- Yo solo decía.

Messi se echó a reír y le dio un beso en la mejilla a Ochoa, el cuál se apartó rápidamente sorprendido.

-¡Lionel ya hablamos de esto!

Guillermo se molestó de nuevo y se fue junto con sus amigos, otra vez estaba molesto, carajo aparte de desmadrosos también eran dramáticos los mexicanos.

-El es así, no le tomes mucha importancia, es un exagerado-le dedico una sonrisa antes de sentarse a comer-

Memo no era así Javier estaba equivocado y pronto descubriria porque se comportaba así, tomo un plato y comenzó a servirse cuando se acercaron Edson y Lozano a hacerle plática, aparte de desmadrosos y dramáticos los mexicanos también eran divertidos y hacían boludeces sin pensarlo dos veces, terminaron de servirse y se dirijieron a la mesa, Messi estaba apunto de sentarse a lado de Ochoa cuando Hirving lo sento junto con el y Javier.

Todos comían "tranquilos" y platicaban con Messi de vez en cuando incluían a Memo a la conversación pero daba respuestas cortas y sin relevancia, poco a poco se daba cuenta de que Ochoa no era el mismo y eso le molestaba, no sabía el porque de su molestia.

-¡Todo estuvo muy rico!, ¿No es así mi memo?

-Ah...si, gracias por invitarnos a todos Lio.

-Esta bien, cuando quieran volvemos a comer todos juntos.

-¡Si!-Todos gritaron al mismo tiempo-

-Nos vemos Memín.

Les dieron un apretón de manos uno por uno mientras salían, después de todo nadie abrazo a Lionel solo le extendían la mano ya que Guillermo los había amenazado y si le creían capaz de golpearlos pero sabían que muy en el fondo quería a todos los de su equipo, el último en despedirse fue Javier el cuál le susurro algo al argentino y le entrego también una bolsa a la cual no se le veía el contenido que hizo que se sonrojara y se riera al abrirla un poco y escuchar lo que dijo el mexicano.

-¿Que le diste sopengo?-ochoa le dio un sape a Javier el cuál solo se rió y salió corriendo de ahi-

-¿Que te dijo?

-Nada, ven.

Messi arrastró a Ochoa por todo el restaurante hasta el estacionamiento y luego lo subió al coche, está sería una noche divertida gracias a la sugerencia de Javier.

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¡Nos vemos mañana!
Ya saben cómo me gustan terminar los capítulos (-^-)
Pista: +18