¿Dead? M.M (2)

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Parte dos.

Advertencia: Menciones de sobredosis, suicidio y muerte. Angustia.


Habían pasado días, en los que siempre ibas a visitar a Max.

A leerle cómics, contarle sobre tu día (aunque tratabas de omitir eso, porque mayormente eran días de mierda), decirle cuanto la extrañabas e incluso pedirle que despertara.

Te sentías bastante sola, solías quejarte por la actitud de Max antes, cuando trataba de alejar a todos. Pero ahora lo entendías. Tu relación con tus amigos iba de mal en peor. Tu rutina era ir a la escuela, después al hospital, después regresar a tu casa y así se repetía diariamente. Menos los fines de semana, ahí solo despertabas, ibas al hospital, llegabas a tu casa y llorabas.

Le contaste a Max sobre tu plan de acompañarla, de por fin volver a verla.

Habías conseguido unas pastillas en el remolque de Eddie, donde de vez en cuando ibas a visitar Wayne.

Planeabas morir de una sobredosis.

Después de planearlo por semanas, por fin era el día.

Te levantaste y dejaste cartas para tus amigos y familia.

No tenías ganas de ir al hospital, tú mamá estaba allí y seguramente haría que te arrepintieras.

En cuanto tomaste las pastillas, sentiste que te desmayarías, te sentías fatal, y de un momento a otro, te arrepentiste y te metiste los dedos a la boca provocándote vomito.

Después de vomitar te metiste a la ducha sin importar si estuvieras con ropa o si el agua salía fría.

Te sentaste en la ducha y lloraste.

No podías creer en lo que te habías convertido. De ser una chica dulce, amable, alegre, feliz, entusiasta y extrovertida, a esto.

Cuando pasaron al rededor de 10 minutos en los que estuviste en la bañera, te saliste y cambiaste de ropa.

Te recostaste en tu cama y dormiste.



Al despertar, viste que habían llamadas en el buzón del teléfono. Y todas eran de tu madre. No le tomaste importancia pensando en que seguramente quería ver cómo estabas, pero al pensar en que podrías estar dormida, dejó de insistir. Trataste de comer algo, pero no tenías ni un poquito de apetito.

Te sentaste en el sofá con un marco en donde había una foto tuya con Max abrazadas. Sentiste las lágrimas picar en tus ojos.

Rápidamente te tallaste los ojos y subiste a cambiarte, decidiste a ir al hospital a ver a Max. Fuiste caminando, el hospital quedaba al rededor de 30-40 minutos. Caminaste mientras mirabas hacia abajo y pateabas algunas rocas que se interponían en el camino. Al llegar al hospital corriste y viste a tu madre firmando unos papeles en recepción, pero tú rápidamente corriste al pasillo del cuarto de Max.

Al llegar esperabas verla postrada en aquella "maldita cama" como tú la llamabas.

Pero no viste nada.

Tú corazón latió fuertemente cuando viste las sábanas tendidas al igual que su bata.

Revisaste en el baño, y todo seguía como nuevo.

"¡Hey! Qué haces allí niña, este cuarto no debería estar abierto."

"Y-yo . . . Lo siento."

"Venga, no te preocupes. ¿Buscabas a alguien?" Preguntó amablemente el doctor. Y antes de que pudieras siquiera contestar lo llamaron.

"Lo siento niña, tengo que irme. Pero puedes preguntarle a la recepcionista sobre el paciente al que esperabas ver."

"Si claro, gracias." El doctor se fue sin más, y tú seguías buscando, con la esperanza de ver a tu pelirroja en algún lugar.

Desesperadamente te asomaste a las habitaciones con cautela. Avanzaste más pasillos y de vez en cuando debías escapar de algunos guardias. Estabas a punto de llorar hasta que viste en una de las habitaciones a Max cepillándose el cabello mientras miraba a la nada aún sentada en una cama, sin ninguna máquina de la que tuviera que depender. Sentiste las lágrimas picar en tus ojos de la emoción. Entraste rápidamente haciendo saltar a Max levemente por tu entrada tan repentina.

"T/n. . . Mi amor" Dijo Max conmocionada mientras extendía su mano pidiendo que te acercaras.

"M-Maxie . . . Cariño" tomaste su mano y te acercaste a abrazarla fuertemente y a la vez de una manera extremadamente delicada, sin poder creerlo.

"Te extrañé demasiado, no sabes todo lo qué pasó mientras no estabas" Dijiste en el abrazo.

"Pues ahora estoy aquí, y no pienso irme"

"Si, pues más te vale"

"Haré todo lo posible porque así sea"

"Pero, no entiendo . . . ¿Cómo despertaste?"

"Pues, no lo sé exactamente. Solo recuerdo que me desperté y me hicieron estudios y me cambiaron de habitación. Obtuve bastantes regaños porque iba demasiado rápido . . ." Dijo Max y tú solo reíste.

"Si, también le dijimos que no debía hablar pero, bueno, es Max Mayfield" Dijo una voz, la cual provenía a tu madre mientras las miraba a ambas encantada.

"Lo siento . . ." Dijo Max y tú pellizcaste con delicadeza las mejillas de Max.

"No hay problema, solo bromeaba. Aunque enserio, deja de hablar si quieres recuperarte antes" Tu madre se fue para darles un poco de privacidad.

Ahí quedaron Max y tú, contemplándose embobadas. Ya habría tiempo para hablar sobre lo que había estado pasando, ahora sólo querían mirarse para convencerse de que estaban juntas.










Espero que este final les haya gustado! Es probable que haga una parte 3 mostrando la recuperación de Max, o puedo ponerlo como un os normal.

Por favor, voten y comenten. Gracias!!

[Sunshine] Max Mayfield & Sadie Sink One Shot & Imagines. Where stories live. Discover now