4. Cobarde

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Pese a escuchar mi nombre salir de su boca no quise voltear, solo seguí caminando hasta que su voz se escucho más cerca y me detuve.

-¿Qué quieres?-pregunte aun sin darme la vuelta y sentí como se iba acercando.

-Yo quería disculparme, no me he comportado bien y olvidar tu cumpleaños fue una estupidez-di la vuelta sobre mis talones y ahí estaba, la imagen del hombre que en este momento amaba y odiaba-Quería darte esto.

-¿Qué es esto?-pregunte tomando la bolsa en mis manos.

-Un pequeño regalo, te gusta pintar así que ahí tienes unas cuantas pinturas, pinceles, lienzos y un libro de arte

-¿Gracias?-por más que eso me enterneciera aun sigo molesta con él

-No es nada, enserio lamento todo lo que paso Astrid

-¿Sabes que en este momento eso no me interesa?

-Se que estas mal por que la preparatoria esta siendo difícil, lo entiendo es un mundo completamente nuevo y supongo que Oswald no los preparo tanto.

-Como sea, a donde vaya la tengo a ella, siempre voy a estar con ella.

-¿Aunque este en el lado incorrecto de la historia?

-Aunque este en el lado incorrecto de la historia-afirme-ya escuchaste lo que le dije a Mala-pronuncie lo más tranquila que pude.

-No está bien que los hayan aventado a ese agujero, pero creo que fue peor que ustedes no los siguieran.

-Heather cree en esos chicos, en que debemos mirar el panorama completo y creo en ella. Si se que en parte debimos haber ido con ellos, pero se otra cosa-el me miró fijamente-Ellos se fueron, nos dejaron en ese agujero y esta bien.

-¿Cómo puede eso estar bien?-pregunto con confusión

-Si la gente se va, eso no es mi culpa ellos tomaron su decisión y yo tome la mía.

-Heather tomó la decisión, no tu.

-Decidí quedarme con ella.

-Debieron ir con sus amigos

-No tienes mucha moral para venir a decirme que debí ir con ellos-le dije cruzandome de brazos, el se sorprendió

-Escucha Astrid, se que cometí un error pero son cosas que pasan.

-Lo sé, pero entonces no vengas aquí a decirme que debí hacer con mis amigos, no me digas que debí ir con ellos por que para empezar tu no hiciste eso

-Una persona madura aceptaría un consejo-soltó con sarcasmo

-¿De quien voy a aceptar el consejo? ¿De otra persona madura?

-Entiendo que estas a la defensiva pero entonces no eres tan madura como crees

-Escuchame bien Hipo-me acerque a él con molestia-Tengo todo el derecho de estar a la defensiva, de estar molesta y eso no me hace menos madura. Dejame decirte que el que seas 3 estúpidos años más grande que yo no te hace más maduro, eres un idiota, es como lo que te haz comportado los últimos meses.

-Se que no debí hacer eso Astrid y estoy arrepentido pero vamos, no todo fue por mi

-Tienes razón, no debí ser tan insistente, no debí dar mi 100 cuando tu dabas el 50, no debi dejarte ver cuanto me importabas por que al parecer eso solo alimentaba tu ego-el me veía con tristeza pero toda la ira que yo no pude sacar por solo estar llorando ya esta saliendo-Pero seamos claros el problema entre nosotros no fue por mi insistencia, es por que eres cobarde-me importaba muy poco sonar cruel-Te diste por vencido, pero ya se que no es mi responsabilidad hacerte sentir como hombre, no te convertiré en algo que no eres.

Lo mire a los ojos por unos segundos y el estaba realmente impactado por mis palabras.

-Lo lamento

-Eso ya no me sirve de nada-me di la vuelta y seguí mi camino hacia mi casa.

Esto no está mejorando para nada y tener a Hipo cerca solo lo empeora.

Long GameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora