La cruzada

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Eran las 5 a.m en calendario humano.
Jerome se levanta con mucha dificultad, aún sin poder mover del todo su brazo herido. El Sangheili que lo atendía lo ayudó a incorporarse y a salir del campamento.

Básicamente era un invalido más, un inútil, o eso sentía. Linda había adquirido una armadura nueva, era una armadura Sangheili, y tenía que usarla porque no había de otra, ella al menos podía luchar aún.

Jerome: si ese bastardo no me hubiera apuñalado...

La caravana del Inquisidor partió, se llevaría a los Soldados que pudieran luchar aún... Jerome no era uno de ellos.

Llegados a la primera zona de avanzada, el pelotón del Inquisidor se comunicó con otro equipo del otro lado del campamento Covenant, tenían planeado una emboscada.

Mahkee, Linda y Seis pertenecían al pelotón inicial, al equipo principal del Inquisidor, ellos darían la señal para atacar al grupo.

Inquisidor: de acuerdo, esperen la señal. En cuanto mi francotirador acabe con el primero nos abalanzaremos sobre ellos, luego vendrán ustedes.

Capitán de segundo grupo: entendido Inquisidor, prepárense por si hay apoyo aéreo.

Inquisidor: tenemos una nave a nuestra disposición, el maestro de nave estará listo por si ocurre un incidente.

R'tas Vadumn: aquí Vadumn, no hay movimiento, esperamos la señal desde la base de despegue.

Vadumn era el maestro de naves, un excelente piloto y capitán. Estaba acompañado por James Cutter, quería mostrarle como funcionaba la nave para que, en algún momento, él pilotara también.

El equipo se arrastró hasta una colina, no fueron vistos. Linda (que traía puesta una armadura Sangheili Spec Ops) se adelantó un poco hasta quedar a la par con el Jackal designado como francotirador.

Linda: ¿una ayudita?

Jackal: Kig Yar está bien, Kig Yar no necesitar ayuda humana.

Linda: bueno, fue una sugerencia.

Mahkee esperaba la orden impaciente, ella había sido equipada con un rifle aguijoneador de larga distancia y un cañón de conmoción, quería ponerlos a prueba. Seis tenía un fusil de plasma y una carabina, tenía conocimiento al respecto y el entrenamiento de la semana pasada le había sentado bien, estaba oxidado.

El Jackal asestó el tiro, la cabeza del enemigo al que apuntaba desapareció en una nube de sangre y materia cerebral, haciendo que el resto del grupo se pusiera alerta. El pelotón del Inquisidor avanzó, también lo hizo el segundo grupo.

El pequeño campamento Covenant atacó al los rebeldes, fue un fuego cruzado no tan intenso que iba más a favor de las Espadas de Sanghelios. Al poco tiempo no quedó más que polvo, pero un rugido advirtió a los pelotones que se acercaba una nave enemiga.

Inquisidor: equipo aéreo, necesitamos intervención, se acercan naves enemigas a nuestra posición.

R'tas Vadumn: entendido Inquisidor, acercándonos a sus coordenadas, vigilen a que le disparan, cuiden sus esquinas. Cambio.

Mahkee: ¿y ahora que?

Un Spirit Enemigo apareció por los aires cargando tropas del Covenant, entre ellos Élites de alto rango, Grunts con cañones, T'vaoan con aguijoneadores y Jackals francotiradores.

Sangheili: creí que eramos los únicos con Francotiradores Kig Yar.

Élite del Covenant: ¡Inquisidor, el honor de los Sangheili ha sido arrebatado por su rebelión. Rindase ahora y evite más agonía para el planeta!

Halo: Espadas de SangheliosWhere stories live. Discover now