Cry

Feliz cumpleaños pequeña perra

A una semana de mi cumpleaños y como es normal entre en crisis y es que no podía definir qué es lo que quería, pero si sabía a quién quería o eso creo porque me quería besar y tal vez algo más con Camilo, pero por alguna razón no dejaba de pensar en Isaias.

El día de mi cumpleaños fue demasiado raro, bueno y gracioso, pero no se olviden que me llamo Fiorela y que siempre paso pena y ese día no fue la acepción. En la mañana desayuné con mi padre, fui a montar caballo y llega la noche, pero aquí les voy a dar un resumen rápido por que pasaron muchas cosas.

En primer lugar, Isaias no fue, creo que fue una mentira o no, eso se los dejo para sus dudas, su escusa fue que se peleó con su padre, en segundo lugar, no había comido nada desde el desayuno, en tercer lugar, Alejandra me trajo Mochis así que esa fue mi última comida del día, cuarto lugar bebí demasiado para alguien que casi no había comido, el lado positivo es que me volví a Chapar a Camilo.

Partiendo desde lo último que dije ahí todo se empieza tornar raro, mi ser ya no era yo, pero tenía que fingir que estaba bien, íbamos en un taxi al after y yo me senté en las piernas de Camilo y nos empezamos a chapar en el taxi. Llegamos a lugar y me destruí, para hacer corta la historia se podría decir que vomite, le dije a Camilo que lo quería seguir besando mientras estaba embarrada en vómito, me llevaron a casa, a la mañana siguiente tuve que decirles miles de mentiras a mis abuelos para que piensen que yo llegue extremadamente sana. Olvide mencionar que si empecé a vomitar fue por que básicamente obligue a Pedro que me meta los dedos a la garganta por que así era la única forma que vomitara, él es buen amigo, me regalo una blusa demasiado bella, soy feliz de que estén en algo con Alejandra.

Pasaron las semanas y todo era como la misma aburrida rutina, me volvía mas paranoicas con las tareas y precisamente sabía que no tenía que romantizarlas para no pensar en mis problemas, pero era inevitable, ya en el colegio lo había hecho y me iba genial, una vez más que lo haga no me iba a dañar.

Un día lluvioso, pero con el calor más asqueroso rompió mi paz, el día que Camilo se enojó conmigo por un comentario que encontré inofensivo, pero a él no le gusto, "tienes más chichis que tu hermana", fue el comentario más tranquilo que pudo venir de mí ya que si hablamos de ofender a las personas jugando eh hecho peores.

Pero no me rompió la paz porque me gustara, si me atrae, pero no me gusta de la forma en la que podría babear con solo verlo, eso me pasaba con un amor platónico que solo lo veía en una materia, pero él no es importante solo era mi distracción de la semana. Volviendo al tema de Camilo, no me incomodo por los motivos ya mencionados, sino que tengo traumas con que la gente se aleje de mi con mis torpezas, no lo hago apropósito simplemente digo cosas sin pesar y a veces dañan a la gente, el hecho de que haya vuelto a pasar después de dos años fue lo que me estaba torturando afortunadamente tengo a Ariel que a pesar de que suelo ser pesada con el mismo tema una y otra vez , él está ahí para mí pero él no es el único ya que esta Pedro diciéndome que todo fluya e Isaias que me dice que lo mejor es hablar las cosas.

Pasaron los días y la misma rutina, pero por alguna razón tenía más recaídas, en una de ellas intente matarme, nadie se dio cuenta los primeros días, solo quería un abrazo, pero todos parecían estar en sus mundos y tampoco quería gritar un "hola casi me mato porque se me pasan ideas muy locas en la cabeza y si no me mato normalmente me auto lesiono". Recuerdo perfectamente ese día. Aún tengo un nudo en la garganta por lo que voy a contar en los siguientes párrafos porque es donde me voy a mostrar como soy, lo que pase y como me siento.

Desde pequeña me lesionaba porque me agarraba odio de la nada cuando me sentía frustrada, todo empezó leve, primero eran pellizcos, luego si no me salía algo bien el colegio me pegaba en la cara, cabeza y brazos, luego paso a pegarme el brazo, los codos contra la pared, pero eso fue empeorando y a veces había días que combinaba todos esos maltratos si algo no me salía bien. Yo sola pare con eso y no sé cómo o la razón simplemente dejo de pasar, pero la noche que volvió a pasarme recuerdo que estaba muy cansada, estresada y mi abuela no dejaba de reprocharme y cuando se descuidaron agarre el cuchillo de la cocina y quise cortarme para aliviar el dolor pero no cortaba nada , entonces agarre otro y no pasaba nada , era como si el maldito mundo quisiera burlarse de mí , fui directamente a mi cuarto agarre una navaja y eso sirvió para abrir las heridas que los cuchillos no pudieron .