forever and always. ⧽ 𝗵𝗲𝗿𝗺𝗶𝗼𝗻𝗲. (𝗲𝘀𝗽𝗮𝗻̃𝗼𝗹)

the sorting

HERMIONE

La profesora McGonagall condujo a los de primer año al vestíbulo de entrada donde pasamos por una puerta gigante, en donde suponía que al otro lado debía estar el Gran Comedor. Del otro lado de la puerta se escuchaban charlas vigorosas y animadas, el resto de la escuela debía estar esperando nuestra entrada.

Mientras caminaba, decidí entablar una conversación con Arley. Hable con él un rato en el tren y, por alguna razón, me sentía muy feliz cada vez que estaba cerca de él. No tenía amigos antes de Hogwarts y esperaba tener ese cambio mientras cursaba mis años aquí.

—¿En qué casa esperas estar Arley? —le pregunté.

—Honestamente, espero que sea Gryffindor o Ravenclaw, siento que ambos me quedarían bien. ¿Y tú, Hermione? —preguntó.

—Realmente espero estar en Gryffindor, pero tampoco me importaría si me tocara en Ravenclaw. —dije— Siento que encajaría bien.

—¡Espero que estemos juntos en la misma casa!

—Eso sería muy divertido —dije con una sonrisa adorable que hizo que ambos nos sonrojáramos.

Mientras continuábamos caminando, la profesora nos condujo a una habitación cerca de una cámara vacía. La habitación era un poco pequeña para la cantidad de estudiantes de primer año, pero con un movimiento de su varita, la profesora McGonagall amplió la habitación hasta el punto en que era lo suficientemente grande como para que cupiéramos todos perfectamente.

—Bienvenidos a Hogwarts —comenzó a saludarnos— Ahora, en unos momentos, atravesarán estas puertas y se unirán a sus compañeros de clase. Pero antes de que puedan tomar asiento, deben clasificarse en sus casas. Las cuatro casas se llaman Gryffindor, Hufflepuff, Ravenclaw y Slytherin. Cada casa tiene su propia historia noble y cada una ha producido magos y brujas sobresalientes. Mientras estés en Hogwarts, tu casa se convertirá en tu familia. Tus triunfos te harán ganar puntos de casa, mientras que cualquier regla romper perderá puntos de la misma —eso sonaba bien— Al final del año, la casa con más puntos recibe la copa de la casa, un gran honor. Espero que cada uno de ustedes sea un sobresaliente para la casa que sea suya. La ceremonia de selección comenzará en breve, les sugiero que todos se agudicen tanto como puedan mientras esperan. —después de su discurso se fue a preparar todo para la ceremonia.

Mientras esperábamos a que nos llamaran, un niño con cabello corto y rubio se acercó para hablar con Harry.

ARLEY

—¿Es verdad? ¿Lo que están diciendo en el tren? —preguntó— Harry Potter ha llegado a Hogwarts —el niño se volvió hacia un par de otros niños que parecían bebés grandes y feos. 

Esos deben ser sus amigos. pensé.

—Estos son Crabbe y Goyle, y yo soy Malfoy, Draco Malfoy —este debe ser el idiota del que hablaba el tío Thomas. Tiene un nombre gracioso y una actitud petulante que lo acompaña.

Ron se rió y llamó la atención de Malfoy.— ¿Crees que mi nombre es divertido, ¿verdad? —dijo en un tono muy hostil— No hay necesidad de preguntar el tuyo, verdad. ¿Pelo rojo y una túnica de segunda mano? Debes ser un Weasley —Ron frunció el ceño ante esta declaración.

Vaya, que idiota.— A quién le importa si es un Weasley, idiota de pelo grasiento —le grité, Malfoy puso su atención hacia mí— ¿Y tú quién eres? —dijo en el mismo tono agresivo de antes.

—Arley Beckham —respondí.

—¿Beckham? Debería haber sabido que defenderías a un Weasley, los traidores a la sangre tienen que permanecer juntos, ¿verdad? —Malfoy se burló.