Capítulo 23.- Regalos.

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Narra Jess.


Estaba con Ariana en el centro comercial, estaba buscando dos regalos, uno para Tyler y otro para Ryan. Sí, los gemelos cumplen años dentro de un par de días y aún no tengo sus regalos.


-¿Qué tienes pensado comprarles? -Preguntó Ariana paseándose por los escaparates de las tiendas.

-Aún no lo sé. Hay tantas cosas...

-Podemos ir descartando opciones.

-Puede que eso funcione.

-Dime algunas cosas que hubieses pensado.

-Ropa, perfume, probablemente a Tyler le pueda comprar algún libro, le gusta leer.

-Puede ser una buena opción, pero tú eres la que los conoce, son tu mejor amigo y tu novio. -Mi novio, que bien suena eso.

-Lo sé pero... nunca le he comprado un regalo a nadie. Soy poco original para estas cosas.

-Déjame pensar...

-Pero no tardes... -Me reí y ella sonrió. -¿Qué pasa? Soy poco original y bastante impaciente.

-¡No me digas! ¡No lo había notado! -Ambas reímos y volvió a hablar. -Son gemelos, y su cumpleaños es el mismo día, por ese mismo motivo debes descartar la idea de comprarles el mismo regalo.

-Entendido.

-¿Qué cosas le gustan a Tyler?

-Le gusta leer, los helados...

-¿Qué no le gusta a Tyler?

-Estudiar.

-Bueno, creo que podrías comprarle algún libro o alguna colección de libros que le guste y un bono de diez helados gratis. -Dijo lo último riéndose.

-¿Eso existe?

-Aunque suene como si fuese la tontería más grande del mundo, sí, existe.

-Pues ya tenemos regalo para Tyler. Supongo.

-Bien... ¿Y a Ryan?

-Música, deportes, sombreros, gafas de sol... Todo lo que tenga que ver con ''parecer más guapo'' él es así.

-Quiere estar guapo para ti.

-Pues eso parece. -Dije riéndome mientras negaba con la cabeza.

-Podrías comprarle unas gafas de sol y... ¿alguna entrada o lo que sea que tengas que comprar para que vaya a esquiar?

-Podría ser buena idea...

-¡Ya tienes regalos para los chicos! Ahora a comprarlos.

-Vamos...


Empezamos a recorrer todas las tiendas del centro comercial, aunque veníamos para comprar los regalos de los gemelos, Ariana se paraba en todas las tiendas para comprarse algo y yo ya no podía con mi alma. Llevábamos más de cuatro horas aquí ¡y ni siquiera habíamos mirado los regalos de los chicos! La mataré. Sí, claro que lo haré.


-Ariana, ¿podemos ir ya a por el regalo de los chicos?

-¡Claro que sí! Vamos. -Me agarró del brazo y me arrastró hasta una tienda de gafas de sol.

-Hay demasiadas... -Dije mirando todas las gafas.

-¡Es una tienda de gafas de sol, claro que hay muchas! Pero si vamos a esta parte donde están las de chicos, y vas descartando las que Ryan no se pondría jamás.

-Hay muchas que sé que jamás se pondría. -Dije riéndome. Al parecer esto no sería tan difícil.

-¿Por qué no te echas una foto con alguna y se la mandas? Así te dirá algo sobre las gafas y así sabrás si le gustan o no.

-Es una buena idea.


Saqué el móvil y cogí unas gafas negras que se parecen mucho a unas gafas que Ryan tenía antes, me las imaginé en él puestas y... definitivamente tengo que comprarle estas gafas. Me puse las gafas y me eché una foto. Ryan no tardó ni un minuto en responder. Y su respuesta me hizo saber que sí, que le gustaban las gafas.


-Listo.


Pagué las gafas y fuimos a una tienda de deportes.


-Hola, queríamos preguntar por si podrían darnos una entrada para ir a esquiar y que no caduque. -Dijo Ariana.

-Claro, tengo una que es para dos personas y son cuatro días.

-¿Cuánto cuesta esa?

-Cincuenta y cinco. Habéis tenido suerte porque justamente están muy rebajadas de precio.

-¡La verdad es que es muy barato! Queremos esa. -Dijo Ariana.


Le di el dinero al hombre y él nos dio la entrada. Al parecer ya tenía regalo para Ryan. ¿Y si no le gusta? Joder, odio comprar regalos, esto se me da muy mal.


-Vamos a la librería que hay aquí en frente, y después vamos a la heladería que está en la planta de abajo.

-Vale...


Media hora después ya tenía todos los regalos e iba de camino a casa... Pienso que los regalos no son tan buenos como a mi me gustaría pero supongo que si no se me ocurre nada mejor, pues así tendrá que quedarse... Y aunque le haya pedido ayuda a Ariana para elegir los regalos ella tampoco parecía muy por la labor de ayudarme. ¡Espero que fuesen imaginaciones mías!


Caminé un par de calles más cuando alguien me tapó los ojos, me puse nerviosísima por no saber quien era hasta que escuché su voz y me relajé por completo.


-¿Quién soy?

-¿Alguien que casi consigue que me de un paro cardíaco?

-Lo siento. -Me abrazó por la espalda y me dio un beso en la mejilla.

-Perdonado.

-¿Qué llevas en las bolsas? -Dijo susurrándome al oído.

-Cosas.

-¿Qué cosas?

-Cosas.

-Vamos Jess, dímelo.

-No.

-No te voy a convencer... ¿verdad?

-Que bien me conoces. -Dije riéndome.

-¿Te acompaño a casa?

-Claro. -Le sonreí y me agarró de la mano.


Esperemos que les gusten mis regalos, porque sino, me sentiré bastante mal aunque ellos no lo consideren ''algo importante''.


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¡Se acerca el cumpleaños de los gemelos! Está tan cerca que el viernes que viene habrá capítulo doble uno narrado por Ryan y otro narrado por Jess. Espero que os haya gustado este capítulo y ¡gracias por leer, votar y/o comentar!

¡Piérdete! -EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora