PRIMAVERA 🌸

173 36 0
                                    

Brotan capullos con timidez,

cubriendo el paisaje de hermosa sencillez.

El sol acaricia la tierra con su luz,

despertando sueños en cada recoveco azul.



La suave brisa de la primavera acariciaba mi rostro mientras me despertaba en un mundo entre sueños y realidad. Mi cuerpo se sentía débil y cansado, pero una extraña sensación de calma y protección me envolvía. Mientras mis ojos se abrían lentamente, descubrí que no estaba solo.

En el hospital, rodeado de sondas de diálisis y suero, me encontraba en una lucha incierta entre la vida y la enfermedad. Pero lo que más llamó mi atención fueron las manos que sujetaban las mías con delicadeza y cuidado. Al levantar la mirada, me encontré con los ojos llenos de preocupación y amor de Wang Yibo, quien había estado a mi lado desde que me encontró.

Una oleada de emociones encontradas se apoderó de mí al darme cuenta de que había perdido el conocimiento en los brazos de Wang Yibo debido a mi delicado estado de salud. Sin embargo, su presencia reconfortante me aseguraba que no estaba solo en esta batalla. A través de su mirada y su suave toque, podía sentir el amor y la preocupación que sentía por mí.

Intenté hablar, pero mi voz apenas salió en un susurro. Wang Yibo rápidamente me interrumpió, sus ojos llenos de determinación. Me aseguró que lo más importante era que me recuperara, que encontrara fuerzas para enfrentar los desafíos que aún nos esperaban. Sus palabras resonaron en mi corazón, llenándome de esperanza.

Durante los días que siguieron, Wang Yibo se convirtió en mi roca, mi apoyo constante en medio de la incertidumbre y el dolor. No se separaba de mi lado, atendiendo cada una de mis necesidades con cuidado y ternura. Sus manos hábiles cambiaban las sondas, ajustaban los medicamentos y se aseguraban de que estuviera cómodo en cada momento.

Cada vez que nuestros ojos se encontraban, podía ver el amor en su mirada, una llama ardiente que me recordaba que no estaba solo en esta lucha. A pesar de los obstáculos que enfrentábamos, él estaba dispuesto a enfrentarlos a mi lado, sin importar cuán difíciles fueran.

Nunca me presionó para corresponder sus sentimientos. En cambio, me envolvió en un amor incondicional, brindándome el espacio necesario para sanar mi mente y corazón. Sabía que había pasado por momentos extremadamente difíciles y que necesitaba tiempo para recuperarme.

En lugar de exigir reciprocidad, Wang Yibo se convirtió en mi refugio, en el apoyo constante que me sostenía en medio de la tormenta. Estaba dispuesto a esperar todo el tiempo que fuera necesario, sin importar si mis sentimientos cambiaban o no. Su objetivo era ayudarme a encontrar la felicidad y la salud, sin importar cuánto tiempo tomara.

Mientras me recuperaba físicamente, Wang Yibo se dedicaba incansablemente a buscar formas de mejorar mi salud. Investigaba sobre nuevos tratamientos, consultaba con diferentes médicos y buscaba donantes potenciales para un posible trasplante de riñón ya que él incluso se hizo una prueba de sangre, quería donar me su riñón pero resultó que no tenemos grupo sanguíneo compatible. Su devoción era una prueba de su amor inquebrantable hacia mí.

Pasábamos horas hablando, compartiendo nuestras esperanzas y mis casi nulos sueños, y también nuestras preocupaciones y temores. Siempre estaba ahí para escuchar mis pensamientos y ofrecer palabras de aliento. Con su presencia constante, me brindaba una sensación de seguridad y paz en medio de la adversidad.

Ah, y me dijo que le gustaba mi voz cuando hablaba y más cuando cantaba, nunca creí tener una bonita voz pero en una ocasión me hizo cantar frente a las enfermeras. Morí de vergüenza, todos aplaudieron, tal vez están mal del oído.

A medida que los días y las semanas pasaban, nuestra conexión se fortalecía. Comprendía que mi sanación no ocurriría de la noche a la mañana, pero Wang Yibo estaba dispuesto a estar a mi lado en cada paso del camino. Juntos, enfrentaríamos cualquier desafío y superaríamos cada obstáculo que se interpusiera en nuestro camino. Y sí cada vez así de a poquito comenzaba a ver un "Juntos" en mi vocabulario.

A medida que mi corazón se abría a este nuevo amor, sentí cómo la primavera florecía dentro de mí. Las mariposas revoloteaban en mi estómago cada vez que Wang Yibo sonreía, y su risa se convirtió en la banda sonora de mi vida. Cada momento compartido estaba impregnado de un amor puro y genuino que me hacía sentir cada vez más completo.

Todo su cuidado y amor desinteresado mejoraron mi situación pero ello no evitaba que la enfermedad siga avanzando. Mi corazón estaba feliz nuevamente pero mi riñón seguía mal necesitaba otro riñón pero ¿cómo lo lograría? Si es bien sabido que la fila de espera de donantes es gigantesca.


En este jardín de emociones florecientes,

se entrelazan nuestras almas en dulce melodía.

Como pájaros que cantan al amanecer.

Cuatro estaciones || YiZhan (COMPLETA)Where stories live. Discover now