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─No

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─No... No, no... ─ Soojin cubrió sus ojos con sus manos, no quería verlo, se apartó del cristal, sus piernas cedieron y cayó de rodillas, mientras rompía en llanto, seguía negando, rogando por que hubiera sido ella y no Shuhua. 

Cuando por fin pudo abrir los ojos, lo primero que vio no fue arena, sino un suelo blanco y lustroso, completamente liso. 

Estaba dentro de la caja de nuevo. 

Miró alrededor, y lo primero que encontró fue, a sólo unos metros más allá, a una Shuhua temblorosa, recostada de espaldas a ella, escuchaba su respiración asfixiada.

─¡Shuhua! 

Fue hacia ella apenas corriendo, ya que seguía sintiéndose débil y fueron sólo un montón de pasos rápidos y temblorosos. 

Cargó a la menor en brazos, girando su cuerpo para abrazarla contra su pecho, la rubia respiraba de forma horrible, parecían leves chillidos que poco hacían algo en sus pulmones, temblaba de forma furiosa y sus ojos dejaban fluir lágrimas constantes, sus manos estaban sobre su cuello en un gesto doloroso. 

─Shuhua, Shuhua, necesito que respires bien, vamos... ─ rogó Soojin mirando sus ojos, que estaban algo perdidos, su compañera simplemente estaba a punto de morir de pánico y miedo─. Shuhua, vamos, mírame─ sus miradas se encontraron, y Soojin se rompió un poco por dentro al ver sólo pánico y miedo arruinando los bonitos ojos de la taiwanesa. 

Shuhua negó, no estaba funcionando, estaba demasiado asustada, sentía como si estuvieran aplastando sus pulmones, no podía respirar, aún en su mente se revivían las imágenes desesperantes de estar ahogándose, busco la mano de Soojin y la apretó con fuerza. 

Le rogó que la ayudara con la mirada, porque en verdad ya no sabía qué hacer, no había forma de estar tranquila. 

─ Shuhua, mierda... ─ Soojin se apartó de ella, dejándola en el suelo, la menor tiró de su mano, para que no la dejara─. No voy a dejarte─ dijo la mayor, su voz usualmente suave salió grave, acercó su rostro hacia ella, rozando sus narices, al hablar sus labios se tocaron─. Relájate un poco─ murmuró, su mano escapó del agarre de la menor y fue hacia su mentón, alzándolo para tirar su cabeza hacia atrás, su otra mano cubrió su nariz, finalmente, juntó sus labios, entreabrió la boca de Shuhua y expulsó el aire con suavidad, no necesitó soltarlo todo para ver que sus mejillas se habían inflado y ella seguía desesperada por aire ─. Respíralo, sigue el ritmo, o respiraré por ti─ dijo al ver que la rubia no había dejado pasar el aire. ─Va de nuevo, Shuhua─ avisó, antes de juntar sus labios de nuevo, la menor abrió su boca, controlando los espasmos que no la dejaban llenar sus pulmones, sin hacer nada, dejando que pasara lo que tenga que pasar, sintió el aire de Soojin llenar sus pulmones, para luego apartarse─. Exhala─ exigió la mayor─. Despacio. 

La mano que sostenía su mentón fue a su pecho, y sintió este bajar con temblorosa lentitud. 

─Soo- ─ su voz sonó temblorosa y aún asfixiada, la coreana le interrumpió instantáneamente. 

𝐋𝐎𝐕𝐄𝐋𝐘 ; ysh & ssjWhere stories live. Discover now