XODÓ (PAUSA)

Capítulo 4 | Floo

Al llegar a casa se me fue difícil subir las escaleras. Llegué a la puerta de mi departamento, empujé con fuerza la puerta haciendo que esta se golpeara con la pared y yo cayera al suelo.

Me puse de pie sosteniéndome de la pared y busqué el interruptor para que me dé luz en mi dulce hogar.

Al ver todo sentía una oleada de tristeza inexplicable.

Ver mi departamento, mis cosas y todo desordenado, me daba una cierta depresión al igualar mis cosas con las de Taehan.

¡Basta! Floo, no puedes igualar tus cosas con las de un chico, ten un poco de decencia. Palmee mis mejillas varias veces

No tengo la mayor riqueza que él tiene, solo tengo lo más económico que me puedo adherir.

Dejé la mochila que traía conmigo en el colgador y mis llaves también, me deshice de mi ropa poniéndome la pijama, me solté el cabello para peinarlo y hacerle un moño que sujete bien los pelos locos que suelo tener cuando se escapan, me puse las pantuflas rosadas y me fui a calentar agua en la tetera para hacerme un té de anís.

Todo eso, haciendo en una suma paciencia que, por el dolor, no me permite moverme libremente.

Me senté en el escritorio encendiendo la laptop mientras sorbia de mi anís, abrí las páginas de mis libros y cuadernos, mientras tomaba un lápiz del estuche. La clase que tomaba es una nocturna, no puedo asistir a la universidad mientras sufro con cuidar de mí, que pedí plazo en estudiar en casa, escogí el horario de la noche, porque siento que es más fácil para mí, sentirme con energías y ganas de querer estudiar, como si fuera un murciélago.

Solo que cuando llegaba sumamente tarde por el trabajo, no podía asistir a la videollamada con todos, pero por suerte mía, grababan las clases para los que no asistieron. Así que hoy me toca repasar escuchando lo que dictaba el profesor y los ejercicios que hacía, con una calculadora resolví los ejercicios y los que no podía trataba de consultar al libro por ayuda o volver a ver las clases pasadas.

Tomé de mi anís caliente, mientras miraba esa hoja llena de fórmulas que resolví. Se siente cansado a veces explotar la cabeza humana, pero también, me siento con una ligera sabiduría que me enriquece.

Muy pronto y terminaré mis clases de administración.

No ha sido fácil, para nada, ha habido veces en las que me he visto llorar de frustración cuando no podía concluir con un trabajo que no podía, y los profesores no querían darme otra oportunidad para hacerlo, otras veces me estreso con las partituras de grupo, que, para mi desgracia, no me suele tocar con grupos responsables.

En total una bola de emociones que te pone difíciles retos, pero el camino a una sola luz. Lo que estudio me gusta mucho y es algo que, a pesar de que me da un coraje inigualable, me gusta y por esa más razones he aguantado tanto que ahora estoy donde debo estar.

Los esfuerzos dan frutos en un futuro.

Eso solía decir mi padre que murió el año pasado, aun duele su recuerdo, no está por todo olvidado.

Pero recuerdo cada mañana cada palabra que me decía que fueron mis fuerzas de seguir con mi camino.

Te escupirán, se reirán de ti y probablemente te humillen, pero tu demuestra que, con tus pobrezas y humildad, saliste adelante sin la ayuda de nadie y que las malas críticas solo es una bola de odio de lo que ellos no pudieron ser que luego..., dolerá cuando te vean ser alguien en la vida y ellos nada.

Escurrí mi rostro en mi mano, ya cansada.

Es todo por hoy, no puedo seguir, tengo sueño y mañana tengo que trabajar, aun con el pie roto, no me puedo dar el lujo de faltar y no tener paga.