𝙔𝙖 𝙥𝙖𝙨𝙖𝙨𝙩𝙚 𝙡𝙤𝙨 20. (terminada)

Más Abajo

Cuando estuvo embarazado se enamoró por completo de la comida rápida y cuando estuvo en depresión le tenía miedo, ahora estába comiendo normal y sin excesos, pero todo esto vino a su cabeza cuando se ganó algunos insultos de otros conductores por distraerse con esa gran M amarilla.

Se le hizo agua la boca cuando estacionó frente al local de improvisto y notó que tenían nuevas cosas en el menú, todo se le antojó y revisó su billetera para serciorarse de que llevaba suficiente, estaba nervioso y tímido.

Respirando rápido por lo que haría entró al autoservicio, un joven intentó atenderlo pero simplemente la vergüenza no lo dejaba pedir, estuvo ahí casi 30 segundos callado sin poder pedir lo que quería. ¿Vergüenza a qué?, es que no se olvidaba totalmente de los insultos de Farlan, de como se enojaba cuando llegaba con comida rápida a casa. Se golpeó la frente un poco fuerte a si mismo y tomó valor.

Eren- hola

- buenas tardes, bienvenido a McDonald's, ¿qué desea ordenar?

Eren- sí, yo quiero 3 hamburguesas grandes, 2 ordenes de papas grandes, 2 jugos de naranja, 2 packs de nuggets, también eso que estaban promocionando que vi allá afuera unas papas con queso y tocino, y por ultimo 2 helados

- bien, pase a la siguiente ventanilla

Estaba emocionado después de pagar su estómago se puso ansioso, todo eso era para compartir con su novio en casa pero a él le tocaría más, sinceramente no era gordo, nunca lo fue, solamente que sus curvas crecieron por la maternidad y por su falta de control con los antojos, Eren estaba y siempre estuvo buenísimo.

Eren- muchas gracias

- gracias a usted, tenga feliz día

Salió y en un semáforo no pudo aguantar, sacó esa hamburguesa supuestamente la más grande pero todos sabemos que en esa cadena de alimentos nada se ve como en los letreros, aún así le dio un mordisco con hambre, masticando esos ingredientes con una pasión muy grande, era delicioso y ya no tenía que preocuparse o llorar.

Eren- oh, Dios mio, cómo está de delicioso

Llegó a casa y con los brazos llenos de bolsas entró tan rápido como pudo, puso todo en el comedor, tiró los zapatos lejos, y se lanzó de lleno a disfrutar de comida no tan saludable y balanceada.

Levi llegó al mismo tiempo que sus padres y se incómodo al verlos, no les dijo nada solo se despidió de Jean y abrió la casa dejando la puerta abierta para que ellos pasaran, Eren fue sorprendido con tantas papas en la boca que no habría forma de explicarlo.

Levi- ¿tú los llamaste?

Eren- eh- sí y te traje hamburguesa y jugo, tus nuggets me los comí... Y tus papas... Y mordí tu hamburguesa

Levi- tks, no te comas mis cosas

Eren- él helado te lo dejé intacto, toma ponlos en la nevera y llévate lo tuyo antes de que no te deje nada

Levi- esta mi hamburguesa, y dos papeles más, ¿te comiste dos y aún así quieres la mía?

Eren- es que- está rica

Levi- toma, comete todo lo que quieras yo me quedaré con el jugo y el helado

Eren- ¿de verdad?

Levi- sí, pero esos atracones sólo una vez por semana o menos, tampoco quiero que dañes tu salud

Eren- sí, sí, te prometo que es solo por hoy