Paul x Daniel

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Un sábado de verano de 1999.

Era otro sábado por la noche, frente al computador, avanzando en el ensayo de lectura, con un taza gigante de café concentrado y la música de Ted sonando desde su habitación de al lado; sí, otro sábado en el afán cotidiano, esperando el mensaje de Paul.

A Daniel, en general, no le gustaban mucho los mensajes.

Desde que tuvo su primer teléfono móvil con capacidad para enviar pequeños mensajes de texto, hasta que Microsoft lanzó MSN Messenger el mes pasado, Daniel no ha podido terminar por encontrar lo emocionante al asunto de mandar escuetos mensajes limitados. Tampoco es que fuese un tipo de muchas palabras, pero él siempre ha preferido conversar con las personas de frente; y, en cuento a las llamadas, éstas estaban en segundo lugar.

Pero, en cambio, a Paul le molaban los mensajes.

Y ahí estaba, esa poco discreta ventana emergente de Messenger cubriendo su espacio de trabajo en el ordenador y sacándole de cualquier tipo de concentración, había aparecido.

"Hola ¿Cómo va el ensayo?"

Paul, ese finalmente era Paul.

Con un suspiro de alivio o resignación, Daniel comenzó a escribir su respuesta pensando en cuán encantado estaba Paul con el nuevo Messenger de MSN, oh sí, hasta el punto de haberlo vuelto tradición los sábados por la noche.

"No es tan penoso como parece. qué tal tú?"

Enter. Y, sabiendo el tiempo que debía esperar, Daniel esperó. Y esperó... Hasta casi cinco minutos después.

"Una mierda. Acabo de llegar de esa porquería de trabajo. Quería salir esta noche, pero estoy jodido. Así que trataré de dormir un poco. Entonces ¿Me leerás tu ensayo? ¿Nos podremos ver mañana? ¿De hecho, qué harás mañana (además de lavar tu ropa)?"

Daniel sonrió en silencio y circundó los ojos al leer el "apropiadamente extenso" mensaje de Paul. Se puso a pensar en qué responder, porque en su cabeza sólo estaba la única cosa de "lavar ropa, lavar ropa todo el jodido día, lavar la ropa de la semana, lavar y lavar lo que no se lavó los anteriores días", hasta que vió un nuevo mensaje ante sus ojos:

"Te extraño"

Lo leyó otra vez, enfatizando cada sílaba en su mente y sonrió, por dentro, en alguna parte de su grácil corazón.

":("

Carita triste; muy bien, esto se había puesto enternecedor; y, si lo que quería Paul era conmover a Daniel, lo había logrado.

"hhmmmm...podemos darle una vuelta al parque. Aeso de las....10 .."

Enter. Otra sonrisa tonta y la paciente espera. ¿Por qué, otra vez, las manos le comenzaban a temblar?

"...de la noche (?)"

Daniel rió.

"DE LA PTA MAÑANA, BANKS"

"Sé amable cariño, no me regañes por favor :D"

"no te estoy refañando jajaaja"

"Tú sabes, las letras mayúsculas son como si alzaras la voz. Además, no especificaste si se trataba de las diez de la mañana o de la noche; no es mi jodida culpa, Kessler.( 'Refañando', LOL)"

"Estoy alzando la voz con cariño (Eres insoportable :). LOL. COMO haces que el textpo salha en cursivas?)"

"No sentí eso, pero está bien; me dan hueva las discusiones. (¿Necesitas que alguien te enseñe dactilografía, Kessler? :D )"

𝘊𝘰𝘴𝘢𝘴 𝘴𝘰𝘣𝘳𝘦... INTERPOL♪♫•°Where stories live. Discover now