05

161 16 2
                                    

–Nunca me había sentido así Harper, creo que estoy enloqueciendo.– Billy volteo a ver a su mascota.

Harper al lado del niño, soltó un ladrido.

Billy junto a Harper caminaban por las calles de Denver, el niño traía su bicicleta con él, pero decidió solo caminar y jalar su bici a su lado.

–Probablemente piensas que estoy loco– Harper soltó un ladrido. –¿En serios piensas que estoy loco?– el golden volvió a ladrar. –Pues no te hablo más.

Billy dirigió su vista al campo de béisbol que estaba cerca de ellos, el niño escuchaba gritos, Billy decidió acercarse un poco más.

Cuando el rubio arenoso llegó junto a la cerca pudo ver quién gritaba, Eden le estaba gritando a un chico, y el chico no se quedaba a atrás, junto a Eden pudo ver a Bruce Yamada.

–¡No es mi maldita culpa que seas un tirador de mierda!– gritaba la pelirroja mientras apuntaba con el bate al chico.

–¡Tú no sabes usar el jodido bate!– gritaba el chico pelinegro.

Billy pudo ver como Bruce le decía algo a la pelirroja, pero ella lo ignoraba por completo.

–¡Oh, créeme lo sé usar! ¡Y puedo fingir que tu maldita cabeza es la puta pelota!– vaya que Eden se escuchaba enojada.

Los otros chicos que se encontraban ahí parados viendo todo, empezaron a abuchear, a excepción de Bruce. Harper empezó a ladrar.

–¡Inténtalo!.

–¡Mejor me voy! ¡No quiero terminar en la puta cárcel por un idiota de mierda como tú!– grito Eden para acto seguido juntar una pelota.

Eden jalo a Bruce del brazo y lo llevó lejos de los demás chicos, ambos empezaron a hablar. Harper aún seguía ladrando, así que Billy trató de tranquilizarlo.

–Tranquilo, tranquilo. Todo está bien.– le decía Billy a Harper.

Después de unos segundos Harper se tranquilizó, y Billy regresó su vista al campo, Eden ya no estaba. El niño busco a la pelirroja con la vista, la encontró saliendo del campo.

–Vamos Harper.– ordenó Billy.

El niño subió a su bici y pedaleo hacia la puerta del campo con Harper a su lado, Eden ya se encontraba fuera del campo, la pelirroja traía un bate en una mano y en la otra una pelota, también traía una gorra en su cabeza.

–¡Hola Eden!– saludo Billy al llegar junto a ella.

–Oh, Hola Billy– saludo la pelirroja sin dejar de caminar. Billy pedaleaba despacio. –. Hola Harper.– el golden soltó un ladrido.

A pesar de que antes estaba enojada, Billy pudo ver una sonrisa en los labios de la pelirroja y él cada vez que la miraba no podía evitar sonreír.

–Me gusta tu gorra– dijo Billy.

–Gracias pero es de Bruce– la pelirroja se detuvo a bajó de un árbol para que no le diera el sol, el niño se detuvo junto a ella, al igual que Harper.

–Ah– Billy observó bien la gorra ahora que estaba quiero, y efectivamente era de Bruce. –, igual me gusta. Por cierto, ¿Qué fue lo que pasó en el campo?.– preguntó curiosamente.

Eden se agachó para poder acariciar a Harper, pero antes dejó el bate y la pelota en el suelo.

–Un tonto al que no le agrado, y él no me agrada, intentaba hacerme quedar mal, y tal vez lo logró.– contó la pelirroja.

–No sabía que jugabas béisbol.

–No creo que sepas mucho sobre mi pero sí, me gusta mucho el béisbol. Bruce me enseña a jugar, bueno, después de lo que pasó hoy no creo que vuelva a querer entrenar conmigo.– Eden dejo a Harper, y agarro sus cosas para ponerse de pie.

𝑩𝒐𝒖𝒏𝒅 || 𝐵𝑖𝑙𝑙𝑦 𝑆𝒉𝑜𝑤𝑎𝑙𝑡𝑒𝑟Where stories live. Discover now