Child of Dreams ♡ KookTae

01

La lluvia caía lento, casi llegando a ser nada, pero siendo lo suficiente para que mojara a las personas que caminaban regreso a su casa, trabajo e inclusive a una noche de fiesta.

Taehyung tuvo el presentimiento de que llovería apenas pidió su Té de Jazmín, sin embargo solo lo pago y lo bebió cómodamente en uno de los alejados sofás de la tienda de tés.
Miraba sin importancia como la gente corría intentado cubrirse de la inofensiva llovizna de afuera y como los automóviles pasaban a toda velocidad por las calles. Intentaba conocer su mundo pero este siempre lo sorprendía con lo más mínimo.

Miro a su lado solo de reojo cuando alguien invadió la burbuja de paz que se dedico a crear en el lugar. Al ver que la persona no hacia nada más que estar ahí parada, volteó la cabeza y lo miro. Una sonrisa se plasmo en su rostro y se hizo a un lado para que tomara asiento junto con él.

—Pudiste haber llamado, estaba por irte a ver a tu casa. Realmente quería llevarte el Té de Jazmín que tanto amas —Hablo el chico a su lado, él solo sonrió de lado y bebió un poco de su vaso.

—Se cuanto me conscientes pero sé que puedo salir a comprarlo también —Sin mirarlo hablo, aún la sonrisa era intacta en sus labios.

—Amor, ¿Ya estas listo? —Preguntó el pelinegro, quiso tomar su mano al verla sobre la mesa pero cuando Taehyung se dio cuenta de la acción la quito rápidamente.

Se tomó un tiempo para pensar sus palabras pues, no es como si una decisión de un matrimonio se tomara a la ligera, realmente debía de tener en cuenta si quería seguir buscando el amor ó quedarse con él por el resto de su vida. Era un poco confuso para su cerebro.

—Yo...uhm lo he estado pensando y considero que tengo que tener más tiempo para hacerlo —Suspiró y por primera vez, desde que el chico llegó, le dirigió la mirada —. Ya sabes, para tomar esa decisión. Por favor HyungSik, dame más tiempo.

—Lo haré, sabes que puedo esperarte.

El chico realmente no lo esperaba solo por que Taehyung era un chico hermoso y encantador en todos los sentidos, quien lo conocía no mentiría, todos lo decían y sabían. HyungSik realmente lo amaba y le había demostrado que estaba dispuesto a dar su vida por él, Taehyung lo tenía claro. Sin embargo algo faltaba ahí y el morocho lo sentía solo que, quería averiguarlo por si sólo. Encontrarse junto a esa respuesta que su novio le pedía.
Aunque realmente la decisión y propuesta le parecía demasiado precipitada de parte de su novio pues, un año, casi dos de relación con el pelinegro no era símbolo de boda o compromiso, como la gente cercana quisiera llamarlo.
Algo como un matrimonio para el resto de tu vida no es como si pudiera tomarse a la ligera. Necesitaba pensarlo mejor por que él realmente quería ser maduro en esa decisión.

—Iré a casa —Taehyung se puso de pie e inmediatamente el otro también lo hizo. El morocho no lo miro.

—¿Puedo acompañarte? Podemos ver algo un rato y después me iré —Dijo HyungSik y esta vez si lo tomó del brazo, acercándose un poco.

—Hoy no HyungSik, realmente quiero caminar a casa solo —Con cuidado quito el agarre de su novio y se alejó.

—Bien, cuando llegues por favor dime ó tendré que ir a tu casa y sabes que no bromeo.

—Lo haré, te avisaré apenas llegue —Rio con diversión y después de eso se alejó poco a poco de la tienda de Té.

—No entiendo, si eres tan joven ¿Por qué querer asaltar una tienda? —Hablo el joven con voz gruesa, quería intimidar y funciono —. Las personas de la tercera edad ya no se pueden defender.

—Lo-Lo siento —El chico se encogió en la silla, parecía que estaba apunto de llorar.

—Si con un "Lo siento" bastará dime ¿Por qué estas aquí? Claro, porque no es suficiente ¿Por qué te hago preguntas con un placa en mi uniforme? Claro, porque no es suficiente.

El chico lo miro. Solo bastaron unos segundos para que volviera a bajar su mirada, el oficial realmente lo intimido. Era joven ¿Cómo no lo intimidaria? Estaba apunto de tener unas semanas en la correccional, claro que había escuchado que en ese lugar no te preparaban Té con galletas precisamente.

El joven dio un salto apenas escucho la puerta del pequeño lugar donde lo tenían abrirse. Miró como entraban más personas y las que estaban con él salían ó al menos aquel hombre que estuvo ahí desde el principio, se quedó.

—Bien —Un oficial miro al joven, llevaba consigo unos papeles pero al mirarlo calló y dirigió su mirada hacia donde el aterrorizado joven estaba mirando —. Jeon, deja de mirarlo así.

—Me da lastima mandarlo por ocho semanas a ese lugar, es joven, no se supone que los jóvenes de su edad estén ahí con jóvenes que realmente decidieron el mal camino.

—Jeon...

—Lo siento.

Escucharon ese pequeño susurró y ambos lo miraron con atención. Jungkook se acerco a él para ponerse de cuclillas, al mirarlo su corazón se apretó, el joven estaba llorando.

—Esta bien, espero que entiendas la lección y después de salir de ese lugar le pidas una disculpa a la señora que agrediste.

El oficial Jeon por fin salió de aquella sala, fue a su oficina, su turno había terminado.

Tomó su saco y su bolso donde llevaba recipientes vacíos de comida. Apago la computadora que descansaba en su escritorio y después salio del lugar, despidiéndose de sus compañeros de trabajo mientras pasaba por los pasillos.
Dio un gran suspiro cuando esa chica que hace unas semanas comenzó a hablarle, se cruzo en su camino.

—He visto que salió un nueva película, de hecho son caricaturas ¿No quieres experimentar cine real? —Hablo la pelirroja con una sornisa, evitando que Jungkook saliera del lugar.

—No, tengo que llegar a casa y alimentar a mis hijos, soy padre soltero y últimamente los he dejado muy solos —Sonrió, tratando de hacerse a un lado.

La chica solo asintió sin ninguna esperanza.
Entendía perfectamente lo que era un "No"

Y Jungkook antes de salir miró a su amigo, quien con una sonrisa graciosa negó con la cabeza y lo despidió con un moviento de mano.

En realidad no estaba mintiendo.