Trust

Estaba haciendo algunos quehaceres en la cocina, pues aunque mi hermano no reaccionó mal cuando le confesé que no estaba estudiando ni hizo más preguntas sobre la razón, no le agradaba la idea de que estuviera desocupado y me puso a cargo de algunas tareas en casa.

Sí, a pesar de que había un montón de gente dentro.

Que no se mal entienda, no me quejo por eso, siempre he cuidado de nuestro hogar; sin embargo, la rutina se ha vuelto tediosa y él un tanto paranoico. Ni con el pretexto de mantenerme ocupado me dejó trabajar fuera, ahora teme bastante por mi seguridad.

Han pasado ya dos meses de la muerte del señor Korn y a la única persona externa que he visto es a mi amigo Ohm, solo un par de veces y  con P'Porsche o algún guardaespaldas vigilando.
Intento entenderlo, no negaré que también quedé asustado, pero me siento totalmente asfixiado aquí, encerrado todo el día y todos los días. No voy sin compañía ni a la tienda, y encima en este sitio ni tienda hay. No tengo excusas.

Tan solo a principios de año tenía tanta libertad de salir a donde quisiera y ver a quien quisiera... con suficiente pasaje para el bus me bastaba.

A pesar de que mi hermano ya me ha ofrecido traer alguna vez a mis amigos del barrio aquí o a alguna de las propiedades, no quiero lidiar con preguntas, o peor, con la idea de que alguien podría lastimarlos relacionándolos conmigo y mi nueva realidad. A veces siento que estoy tan paranoico como él.

Lavar los platos antes de ir a dormir era el momento más reflexivo del día, y mientras miraba las cucharas de sopa recordé lo que me espera. P'Porsche consideraba que mamá mejoró lo suficiente como para que al fin salga de la biblioteca sin miedo y se incluya a nuestras vidas dentro de sus posibilidades. Estaba muy feliz por ello, pero últimamente la alegría no me dura mucho...

Suspiré.

Era obvio que eventualmente todos aquí fingirían que nada pasó y actuarían bajo su concepto propio de "familia". Mañana sería el primer almuerzo familiar dominical; y en casos normales no me opondría a ello. Sin embargo, sabía que él iba a estar ahí.   

Sé que después de la constante insistencia del señor Tankhun él aceptó venir.
No sabía qué pensar, no ha intentado contactarme después de la canción, creí que vendría a buscarme para hablar, pero no; así que confío en que todo acabó, aunque no tengo idea de cómo espera que me comporte en ese momento y en adelante.

No quería tener esa plática, ninguna de hecho, si todo fue una mentira enorme. P'Kim y yo no tenemos nada en común. Ni en gustos, ni experiencias de vida; no solo por el asunto del crimen, sino por la edad.

No, en serio, ¿cómo lo trato ahora?

¿Finjo que no lo conozco?, o ¿digo que lo vi solo una vez en el colegio y...

No, el señor Tankhun me preguntaría por qué no se lo comenté cuando me lo presentó en fotos. ¿Pretendo que lo recuerdo ligeramente después de que me secuestraran a pesar de que mi mente estuviera en el más allá? Mmm, no.

Creo que la primera es la mejor opción, sin embargo, algo me dice que será muy notoria mi cara de desagrado cuando si quiera me dirija la mirada. Agh, de vez en cuando odio ser tan expresivo. No me queda más que intentarlo.

...............  

"¿En verdad debo ir?"

Evidentemente no quería visitar el lugar en el casi matan a mi hermano.

Sí, ya sé que él fue allá a empezarlo. No importa. Además, tengo planes con mis amigos.

"En realidad no." Comentó P'Pete.