-Tranquila mi vida… lamento mucho haberte dicho todo eso, pero tú sabes que tengo razón-

-Lo sé, pero… no quiero perderla- respondió entre sollozos aferrándose a su madre- la amo, amo a Sophia y me dolería para toda la vida perderla…- Anne comenzó a sentir un poco de culpa por lo que después de pensarlo por varios segundos habló nuevamente-

-Bien, mi niña…-dijo tomando el rostro de su hija entre sus manos- te llevaré a la casa en la que Sophia y mis nietos están, pero antes debes prometerme que no iras a discutir con nadie y cuando digo con nadie me refiero a Jillian y mucho menos con Sophia, ella no se ha estado sintiendo muy bien en estos días-

-¿Sophia está enferma? ¿Qué le ocurre? – preguntó Toni con notable preocupación en su voz-

-No lo sabemos cariño… Betty también ha estado sintiéndose un poco mal pero ninguna de las 2 quiere ir al médico- explicó Anne- Pero bueno, déjame guardar las cosas y te llevo… Ah, pero eso sí, tendrás que aceptar mis condiciones para poder llevarte- dijo la mayor de las Topaz y la morena asintió. Casi 35 minutos después Anne estacionó su auto frente a la hermosa casa en la cuál Sophia y Jillian junto a los pequeños llevaban viviendo durante el último mes, le pidió a su hija que esperara pacientemente en el auto mientras ella iba a tocar el timbre, segundos después de dicha acción Jillian apareció tras la puerta.

-¡Anne! Que bueno verte- dijo muy alegre abrazando a la mujer quién rápidamente le correspondió el abrazo- Y veo que no vienes sola- observó a Toni quién esperaba en el auto- si no supiera que Toni es tú hija me hubiese preocupado de que la estuvieras secuestrando-

-Bueno, a personas desesperadas, medidas muy pero muy desesperadas- respondió con una sonrisa mientras ambas observaban a Toni con sus ojos cubiertos por un venda- Quería hablar con Sophia o bueno más bien Toni quiere hablar con ella y decidí traerla así, cubierta de sus ojos-

-Anne, tú sabes que todos son bienvenidos aquí, pero… Sophia no está, salió al orfanato a reunirse con algunas de las encargadas… Las pequeñas y el pequeño Aiden tampoco están, a excepción de Mía quién está en el jardín esperando por mí-

-Oh bueno, en ese caso le diré a Toni- respondió Anne con una mueca de tristeza en su rostro-Permíteme unos segundos- dijo y Jillian asintió con una sonrisa, observó como Anne se alejaba hasta su auto, observó conversar a ambas mujeres y después de varios  minutos Anne nuevamente regresó dirigiéndose a ella con una tímida sonrisa- Jillian cariño… Toni quiere saber si puede hablar contigo-

-Oh bueno, yo… está bien- respondió segundos después, Anne nuevamente regresó hasta su auto, ayudó a Toni a bajar de este y seguido le quitó la venda de sus ojos, la morena fijo su mirada en Jillian quién al igual que ella la observó a medida se iban acercando…






Pov Toni.


-Anne ¿Porqué no entras?... Estoy muy segura que Mía estará muy feliz y emocionada de verte otra vez- escuché que Jillian le dijo a mi madre quién rápidamente asintió con una sonrisa, ambas nos observábamos por un par de segundos- ¿Y… de qué quieres hablar conmigo?- preguntó-

-Yo quisiera… quisiera pedirte disculpas- le respondí- Mis actitudes han sido muy vergonzosas y mi educación ha quedado por el suelo… Jillian, yo realmente lamento lo que te hice- Ella me sostuvo la mirada en total silencio por varios segundos que parecieron los minutos más eternos-

-¿Te gustaría pasar?- preguntó, la observé extrañada y ella de nuevo habló- Ven, no te hagas la tímida… siempre he creído que las disculpas se reciben en compañía de una buena copa de vino- hablaba mientras avanzábamos por la gran y hermosa casa, me mostró los lugares de la planta baja hasta que finalmente llegamos a la cocina en dónde una puerta corrediza de cristal nos separaba de salir al jardín, me acerqué a dicha puerta y observé a mi pequeña Mía quién sonreía ampliamente en compañía de mi madre-

-El resto de los pequeños no están- dijo Jillian colocándose junto a mí, tendiéndome así una copa con vino- Britta salió con Olivia, Scarlett y Leah fueron con Verónica y Betty mientras qué Alondra, Salomé y Aiden salieron con Jason, Polly, Jazmine y Minerva- explicó, asentí en total silencio- Y Sophia ha salido  a reunirse con las encargadas del orfanato-

-Gracias por informarme, Drake- contesté- aunque a decir verdad me hubiera encantado verlos pero sé que de ser así en estos momentos ni siquiera estaría aquí… Sophia no me hubiese permitido siquiera poner un pie fuera del auto-

-Tienes razón, Soso no lo hubiera permitido… te has equivocado tanto en cuestión de semanas que pareciera algo imposible el creer que ustedes están casadas y que tienen la familia más hermosa que pudiera existir-

-Yo amo a Sophia… y sé que  puedes no creerme por todas mis  actitudes pero de verdad la amo con mi vida- dije observando a Drake- y por el mismo amor que siento por ella es qué debo preguntarte si ¿me fue infiel contigo?-

-Toni, Toni… me parece que conoces muy poco a la mujer que dices amar- habló mientras se giraba para dirigirse a la cocina la observé sacar un par de vegetales del refrigerador seguido a esto busco una tabla para picar y junto a esta colocó un cuchillo- Ven, ayúdame a preparar la comida- dijo mientras yo me acercaba y ella se alejaba buscando una caja de pasta, segundos después se acercó a mi y también comenzó a picar vegetales- Sophia te ama y ella nunca te sería infiel… y sé lo que escuchaste aquella noche y no lo negaré, Soso y yo si estuvimos juntas hace muchos años pero eso se terminó-

-¿Entonces tú y ella no están juntas?- pregunté sintiendo cómo un nudo de nervios se formaba en mi estómago, seguido de una fuerte carcajada por parte de Drake-

-Toni eres muy boba, pero si y no… Sophia y yo no estamos juntas, no de la manera que crees, sin embargo si estamos viviendo juntas pero no como pareja, sino como muy buenas  amigas- respondió, ambas guardamos silencio por un par de minutos en los cuáles solamente  el sonido del cuchillo se escuchaba  chocar contra la tabla de picar- Jamás había visto llorar tanto a Sophia como lo hizo la primera semana lejos de ti, todas esas discusiones, todas las palabras y actitudes que tú tuviste con ella realmente la lastimaron y sé que no debería decírtelo pero… prepárate Toni, porque Sophia quiere comenzar los trámites del divorcio…-

-No, eso no… yo la amo demasiado Drake, realmente la amo, no puedo perderla- confesé sintiendo las lágrimas bajar por mis mejillas- Por favor, ayúdame a recuperarla, tú puedes hacer que ella quiera volver a casa conmigo…no te conozco a la perfección pero sé que eres muy importante para ella y puedes hacerla cambiar de opinión-

-Toni, escúchame... Yo de verdad quisiera asegurarte que puedo hacerla cambiar de opinión pero… el matrimonio solo es algo entre ustedes, la única que puede hacer que cambie de opinión eres tú- dijo entregándome una servilleta de papel para limpiar mis lágrimas- Sophia te ama con cada parte de su corazón pero está molesta y triste por tus actitudes, solo dale tiempo, ve a buscarla para conversar sin discutir y demuéstrale todo el amor que sientes por ella- asentí mientras limpiaba mis lágrimas-

-¡MAMÁ!- escuchamos de pronto el grito de Mía, la observé entrar y de inmediato me coloqué de rodillas para recibirla entre mis brazos- ¿Porqué lloras?- me preguntó-

-No es nada mi pequeña, solo es un poco de cebolla que tuve que picar- respondí observando su rostro-

-¿Te quedaras a comer con nosotras, mamá? ¡Podemos llamar a mamá para que venga a comer con nosotras!- dijo con emoción-

-Alto, alto mi pequeña caperucita, mamá Sophia está muy ocupada y volverá pasada las 5 de la tarde, te lo dijo antes de marcharse- interrumpió Jillian- Qué te parece si mejor… ¿Comemos las 4 juntas y pasas un par de horas junto a Mamá Toni?-

-¡SIII…! Esa es una súper idea- le contestó y yo sonreí-




SEMPITERNO llWhere stories live. Discover now