No podía estar más cómoda en mi cama mirando el techo. Ya eran casi las 7 de la noche.
[WhatsApp de Marcos]
Llego por ti en 15 minutos.
MIERDA.
15 MINUTOS.
Y NO ME HE ARREGLADO.
Me bañe lo más rápido que pude. Al salir me paré frente al armario, no sabía qué ponerme.
[WhatsApp de Marcos]
Ya estoy aquí.
Termine de maquillarme y baje.
-Ya tu novio ha llegado-dijo mi madre saliendo de la cocina con una taza de café.
-Lo sé y no es mi novio.
-Si, si y yo nací ayer.
Rodee los ojos y salí.
-Eh-dije al entrar al coche-¿es tuyo?
-No, es de mi hermano.
-¿Tu hermano te ha prestado su coche?
-No en realidad, solo lo tome por un rato, estaba durmiendo cuando se lo iba a pedir y no quería molestarlo.
-Creo que se molestara cuando vea que no esta.
***
Nos aparcamos no muy lejos de la heladería.
-¿Por qué te aparcas aquí y no frente la heladería?
-Porque quería caminar un rato y charlar.
Asentí.
Hablamos de muchas cosas, así cosas estúpidas tal como: ¿cuál es tu color favorito? ¿Cuál es tu comida favorita? Otras un poco más personal: ¿que ha pasado con tu padre? ¿Haz hablado con él desde que se fue? Igual no me atreví a preguntarle sobre su madre.
-¿Podríamos no hablar de mi padre ya?
-Esta bien.
Mi abrace a mi misma, hacía mucho frío. Me arrepentí de haberme puesto esta camisa.
Sentí como Marcos puso su chaqueta sobre mí. Lo mire y le di una sonrisa, la que él devolvió.
***
-Llegamos.
-¿En serio? No te creo.
-No vale, estás muy graciosa.
-¡Que va!.
-No fue una pregunta, fue una afirmación.
-Lo sé.
-Eeh No me digas que estás en tus días-lo fulmine con la mirada.
-No ando en mis días, solo quería molestar-alzó una ceja y negó con la cabeza.
-Entremos-dijo pasando su brazo por mi hombro.
-¿Cuál quieres?
-Cualquiera que tenga chispas de chocolate-al decir esto busque una mesa y lo esperé sentada.
Al verlo venir con mi helado, era ver la gloria.
-Aquí tienes señorita-sonreí.
-Gracias.
Él ni siquiera había probado su helado solo se me quedaba viendo.
-¿Pasa algo? ¿Por qué no tomas de tu helado?
-Nada, solo que te ves demasiado feliz.
-Ah eso-di una pequeña risa-me gusta mucho el helado.
-Si, ya me he dado cuenta.
Pegue mis labios al helado y estaban completamente llenos de él, le hacía muecas a Marcos. Mire hacia un lado para buscar algo con que limpiarme y cuando volví a mirar hacia él, estaba muy cerca de mí. Abrí los ojos, Marcos me tomo de la barbilla y me acerco a él. Me beso. Se alejó lentamente, se acomodó en sus asiento y comenzó a comer su helado. Yo solo me quedaba viéndolo como una gilipollas. Marcos volvió a mirarme, mordí mi labio con nerviosismo.
-No vuelvas a hacer eso-hable.
-Tu empezaste-lo mire sin entender y creo que entendió mi mirada-tu comenzaste a hacerme muecas con esos labios hermosos, no lo pude evitar.
Trágame tierra, en estos momentos debo estar más roja que un tomate.
-Tampoco me digas cosas así.
-Alicia, me gustas mucho.
***NOTA DE AUTORA***
Una pregunta ¿de qué país son? Me gustaría saber de donde me leen. Yo soy de Puerto Rico. Una pequeña y hermosa isla del Caribe. <3
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Era un día común y corriente. Estaba en la cafetería de siempre cuando de repente recibí un WhatsApp. [WhatsApp de +34 123 456 789] -Hola preciosa. -¿Se puede saber quién eres y cómo tienes mi WhatsApp? -Lo que tienes que saber es que te conozco per...