16. Dar un gran paso

Start from the beginning
                                    

Cuando entramos a la privada pude divisarla mejor que anoche que estaba lloviendo

Y si, era el típico barrio de ricos, pero se me hacia un tanto familiar

- ¿Cierto Sam? – despegue mi vista de las casas para prestarle atención a Paula

- ¿Mande?

-Le estaba diciendo a Papá que sabes tocar la guitarra – asentí

-Sí, ese y unos cuatro instrumentos más – Paula me miro asombrada

Ese era un dato que no conocía de mi

-Eso es admirable – sonreí ante la respuesta de su padre – que talento

-Gracias

-Bien, llegamos

Salimos del auto y me di cuenta que el padre Paula era mucho más alto de lo que aparentaba

-Bien, encantado Sam – me estrecho su mano

-Igualmente señor Dugés

-Adelante – Paula abrió la puerta de su casa

-Espérame aquí, ya vengo – asentí cuando vi a Paula desaparecer de la sala, el señor Dugés iba atrás de ella

La sala era preciosa y enorme, de un color crema. No me gustaba tanto, me hace recordar el pasado y es justo lo que no quiero en estos momentos

Antes de que me pusiera sentimental, mi teléfono vibro haciendo señal de un mensaje, abrí el mensaje

Taylor

- ¿Si recuerdas que les dije que tenía que decirles algo?

-Nos vemos en casa de Alex

Recuerdo que nos dijo que teníamos que hablar, pero que lo haríamos luego, pero tengo otra cosa más importante hacer asique lo olvide

Me metí al chat de Alex a enviarle un mensaje

Alex

- ¿Qué quiere Taylor?

- ¿Cómo que sí que quiere?

- ¿No te mando mensaje?

-No, no me ha llegado nada

-Iba hablar con nosotras hoy, y que nos vemos en tu casa dice

-Sí, me acaba de llegar el mensaje, bueno aquí nos vemos entonces

Sali del chat de Alex y entre al de Taylor

-Iré como a las cuatro, estoy ocupada

- ¿En qué?

-Cosas

-Esto es importante

-Lo mío igual es importante a las cuatro o cinco, tómalo o déjalo

-Lo tomo

Guarde mi celular cuando escuche la voz de Paula cerca

-Mamá ella es la chica que quieras conocer, Sam ella es mi madre – sonreí

-Mucho gusto señora Dugés, Samantha Wells – la señora me regalo una sonrisa cálida, sus ojos eran color miel

Creo que por eso Paula tiene los ojos verdes claros

-Encantada de conocerte Samantha – sonreí – mi esposo ya me dijo que te dio las gracias por traer a mi hija, y también te agradezco por eso

-Descuide no fue nada, era muy tarde y estaba lloviendo no la iba dejar sola por la lluvia

Las Chicas De La BandaWhere stories live. Discover now