Capítulo 11

Beginne am Anfang
                                    

Hay errores que por más que lo sea, no implican que no sucederán de nuevo. Los errores se repiten infinitamente, para aquellos que no están dispuestos a aprender del pasado.

Mierda, se supone que yo he aprendido de mi pasado. Pero joder, ¿Qué hago si mi pasado no se paree en nada a él? Nunca me había encontrado en una situación como esta.

Me ducho rápido, cepillo mi cabello, agrego algo de maquillaje a mi rostro y luego en mi habitación busco un atuendo, que consiste en una falda y un crop.

—¿Lista? —toca mi puerta Kim.

—Andando. —le digo al abrir.

—Brian nos espera abajo. —me dice– Y no es que me queje, pero, ¿donde quedo la Charlie que no quería salir de fiesta?

—Lo necesito.

—No te ves bien.

—No es nada. —le digo.

Nunca le he contado a nadie mis problemas, ni con que chicos estoy ni nada, mi mierda es mía, solo yo lidio con ella.

Ambas bajamos y subimos a la camioneta de Brian, y él nos dice que iremos a una discoteca, cosa que por mi va excelente. Luego de unos minutos llegamos, y me prometo a mí misma que ya que esta noche ya la cague que más da un poco más, porque mañana tengo que buscar un trabajo más, y ponerme al día con mis trabajos de la universidad, así que hoy puedo decir que se joda el mundo. Ya mañana será un nuevo día para lidiar con las jodidas consecuencias.

Kim invita la primera ronda de shots de tequila, y luego de eso ambas vamos a la pista y comenzamos bailar, luego seguimos con shots, y más shots, de repente solo sé que bailo con un desconocido, mientras contoneo lo más que puedo mis caderas, y por alguna razón que culpare al alcohol, él viene a mi mente, su aliento en mi cuello, como todo mi cuerpo reacciona a él, como sus manos marcaban cada parte de mí piel, como se sintió dentro de mi, como... no. Mi mente no puede ir en esa dirección, tal vez a veces las reacciones de mi cuerpo no las controlo, pero mi mente sí y si tengo que obligar a mi cuerpo a no reaccionar a él, lo hare, mi mente es lo suficientemente fuerte para hacerlo. Así que me doy la vuelta y me enfrento al chico con que he estado bailando que obviamente no es él, es alto, con cuerpo atlético, cabello negro al igual que sus ojos. Y que no es él, es todo lo que digo mientras lo atraigo hacia mí para besarlo, y el chico hace muy bien su trabajo, me besa con intensidad mientras me atrae a su cuerpo, pero no tiene la agresión suficiente, o al menos la que estoy buscando.

No es él.

Mierda. Me separo del chico, ya que no estaba ayudándome en lo absoluto. No dejo que diga nada y me acerco a la barra por más alcohol. Bebo hasta que siento que mi mente no esta tan jodido, y luego busco a Brian para que me lleve de regreso, ya que no puedo seguir gastando dinero en ubers.

—¿Puedes llevarme? —le pregunto cuando al fin lo encuentro.

—Mierda, estas hecha... bueno mierda.

—Gracias, ¿puedes sí o no?

—Claro, yo solo he bebido una cerveza, —me dice— Kim se fue con un chico.

Llegamos hasta su auto y perdiendo la noción del tiempo estamos frente a mi edificio.

—¿Te ayudo a subir?

—No necesito ayuda.

Con eso bajo de su auto, y segundos después él también lo hace.

—Eres una testaruda de mierda, ¿sabes? Y no está mal aceptar ayuda.

—¿Por qué mierdas sigues ofreciéndome tu ayuda? Cuando claramente te he dicho que no, ni quiero ser tu amiga.

—Porque no te estoy preguntando si quieres ser mi amiga.

Overcut [+18] terminadoWo Geschichten leben. Entdecke jetzt