Cap 16 "Beso"

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Ben ya había regresado a su tierra de origen. Archenland. Después de pasar cinco largos años en un país al sur del mundo. Expandió tanto conocimiento como estatura. Ya era todo un hombre que perfectamente podía servir al Rey. Lo primero que hizo fue dirigirse al norte del país donde residía su padre, uno de los siete Lords del país... Aunque en estos momentos solo existían seis ya que la comitiva aun no designaba a un reemplazante para el ex Lord Croi. Al re encontrarse nuevamente, se dieron un fuerte abrazo y su madre, con lagrimas de emoción en su rostro, le hizo pasar de inmediato a la casa. Llamó a una de sus criadas y le pidió que le sirviera un enorme banquete ya que su único hijo finalmente regresaba a casa. Mientras se ponían al día con todo lo acontecido recientemente en el país, una de las primeras preguntas fue si el chico se había casado. Él negó con la cabeza. "Pues, entonces esta es tu oportunidad" susurró su padre.

-¿A qué se refiere?  -preguntó el joven sin entender las miradas expectantes de sus padre. Mas bien esperaba un reproche por aun no haber tenido una mujer.

-La Princesa Talita no se casará con aquel Rey de Narnia como se comentó durante el duelo. La princesa busca un nuevo prospecto ya que es la heredera al trono. El Rey de Narnia nunca mas regreso por ende no esta interesado en la hija menor de Lune. Esta es tu oportunidad, Ben. Si te casas con ella, podrás ser Rey conserte. 

-¿¡Casarme con Talita!? -enarcó una ceja- Pero no la he visto hace años y solo nos mandamos cartas un par de veces en todo este tiempo.

-¡Qué da! -Su padre se echó a reír- Ya tendrán tiempo para ponerse al día. De seguro que la muchacha ya viene de regreso al país. Vamos donde el Rey ahora mismo ya que prometió declararte caballero una vez que pisaras Anvard.

En ese momento, Talita iba dormitando en el carruaje de vuelta al país. Fue un largo recorrido por calurosas tierras, las cuales no le gustaría volver a visitar. A momentos miraba por la ventana para saber si ya se asomaba la larga columna montañosa que anunciaba la llegada a Archenland. A pesar de haber tenido una conversación con su hermana pidiéndole que dejara atrás todo lo sucedido con Edmund, no podía evitar pensar en él. La ráfaga de recuerdos invadía su cabeza: la calidez de sus manos, su sonrisa brillante y la manera en que se meneaba su oscura cabellera al viento. También se culpaba por dedicarle tiempo pensando en ello y no en el largo gobierno que le esperaba.

Cuando Lord Croi se mofó de ella por solo seguir traidores, la verdad que ya sabía todo lo que Edmund había pasado con la antigua Reina de Narnia, Jadis. Talita se sintió tan interesada en algún momento por el joven Rey que le fue inevitable pedirle a su profesor de historia que le contara sobre el actual reinado de Narnia. Él le dijo que no podía hablar mucho sobre "la traición" en sí, pues en Narnia existe una autoridad aun mas grande que los propios Reyes, llamado Aslan. Él fue quien pidió a todos que nunca más se hablara sobre el tema porque él lo dio por finalizado cuando habló con Edmund de frente, cuando solo era un niño. "Yo no conozco a Aslan en persona pero todos dicen que es alguien fuerte y poderoso. Si él pidió no hablar de la traición, le respetaré porque temo que se enoje conmigo" susurró aquel Profesor, como si el propio Aslan estuviera cerca escuchando todo.

Al llegar a Anvard cuando ya anochecía, Talita bajó del carruaje con la ayuda de un sujeto desconocido que no había sido participe del viaje.

-Ha pasado mucho tiempo, Alteza -dijo aquella voz grave. Y no era cualquier persona. Se trataba de Ben. Si, aquel que estaba de regreso a su país y conversaba con sus padres.

Reconoció esa cara a pesar de traer varios años más encima: Los ojos de Talita brillaron y de inmediato saltó sobre él para abrazarlo fuerte. "¡Ben, eres tú!" gritaba de alegría la dama, mientras recordaba todos los buenos momentos que pasó con el muchacho cuando eran niños. Y si, ya no tenía su rostro infantil. Ahora era un hombre, con un rostro cuadrado y nacimiento de barba en el mentón. Lilian también le saludó con mucho entusiasmo. No esperaba ver tamaña sorpresa de regreso a casa.

La Propuesta (Edmund Pevensie Fanfic)Where stories live. Discover now