Capítulo 8

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24 de Agosto del 1977.






Nuestra castaña favorita se encontraba comiendo junto a Robin en el recreo, cuando se acercaron Finney y su hermana con ellos y se sentaron, la ojiverde estaba feliz de que últimamente tuviera más interacción con el chico que le gustaba.

— Hola Robin, Hola Nea.— saludó el niño.

— Hola chicos.— también saludó Gwen.

— Hola Finn y Gwen.— devolvieron el saludo al mismo tiempo.

Finney se quedó mirando el rostro de Atenea y aunque ella intentaba ocultarlo con su cabello se dió cuenta del golpe.

— ¿Qué te pasó, Nea?— preguntó con clara preocupación.

— Fué el idiota de Moose.— respondió Robin por ella.

— ¿Te golpeó?

La niña logró evitar rodar los ojos ante la pregunta obvia del castaño.

— Sí, pero estoy bien Finn.— aseguró sonriendo con los labios cerrados.

— Por suerte Vance y yo llegamos a tiempo, estoy seguro que al imbécil de Moose no se le ocurrirá volver a hablarle a Nea, hubieran visto como quedó con la golpiza que le dió Vance.— soltó una risa

— Él estaba muy molesto, hasta a mí me dió miedo.— comentó Atenea mientras revolvía su comida.

— Lo importante es que estás bien, Nea.— dijo Shaw, sonriéndole.

De pronto un niño pasó corriendo con una tira de papel higiénico pegado en el pie y tropezó, cayendo de una forma graciosa, los 4 rieron, la castaña miró a Robin mientras reía y se tapaba la boca con una mano, el chico la miró con confusión.

— Atenea, ¿podemos hablar?— preguntó de pronto Gwen.

Eso extrañó a los tres, Atenea dejó de mirar su comida y le respondió.

— Claro, no hay problema.— ambas se levantaron y se fueron a la cancha.— ¿Qué pasa Gwenny? ¿Te puedo decir así?

— Claro que sí.— le sonrió.— yo quería hablar contigo sobre...

Por un momento se quedó pensando si era buena idea decirle lo que pasaba, ¿y si solo la asustaba por nada y en realidad su sueño no era real? Tal vez era solo un sueño normal, como el típico que tenía cuando soñaba que un tiburón enorme la perseguía, no obstante, si era real podría salvarle la vida, tal vez por eso jesús le había mandado ese sueño, suspiró internamente.

— Quería hablar contigo sobre chicos, ya sabes, charla de chicas.— dijo finalmente.

— Oh... Bueno, ¿y quieres hablar de algo en específico sobre eso?— preguntó con amabilidad Atenea, tenía el presentimiento de que eso no era exactamente lo que quería decir Gwen, pero lo dejó pasar.

— Sabes, es que me gusta un chico pero no sé cómo acercarme a él.— respondió con una mueca, no era del todo mentira.

— Oh, pues en realidad con cualquier excusa podrías hablarle, ¿va a clases contigo?

— Sí, llevamos matemáticas juntos.

— ¿Y él es bueno en esa materia?

La niña negó con la cabeza.

— Podrías ayudarle con eso, y así frecuentarlo más, conoce sus gustos y házle preguntas sobre eso.— aconsejó sonriendo de lado.

— Eres muy buena dando consejo, ¿tienes novio?

The first victim. •The black phone•Where stories live. Discover now