Ser tan reconocida no es muy favorable que digamos, hay veces en las que es preferible estar un tiempo alejado de las cámaras, sin tener tantos escándalos de por medio.
Por ese mismo motivo decidí regresar a mis raíces, dejando todo esos lujos atrá...
-Hyung- miré a JeonHo el cual había entrado a la tienda - Zenda- se detuvo para tomar aire - Zenda está aquí, volvió - dijo emocionado y simplemente apreté mis labios volviendo a acomodar aquellas rosas blancas- ¿Puedo ir en casa de la señora Ji?-
-No, hay mucho trabajo en la floreria para que estés estorbando en casa ajena- le di las tijeras - Toma ponte a trabajar -
-¡Hyung!- protestó y decidí ignorarlo- Por eso Zenda te dejó - soltó y con molestia tomó las cosas para ir y preparar las demás flores.
-Mocoso- desvié mi vista hacia aquel auto blanco y bufé para luego ir y atender a la mujer que había entrado a la tienda.
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Zenda.
-En serio no me creo que estes aquí - dijo mi madre en cuanto mi padre dejó mis maletas en la sala
-Hace mucho que no venía aquí-
-¿Cuanto tiempo te quedarás? - negué.
-No tengo fecha para regresar a Seul-
-Pero ¿Y tu trabajo?-
-He decidido tomarme un tiempo bastante extenso- sonreí abrazando a mi madre - Los extrañé mucho-
-Y yo a ti, como no tienes idea - me abrazó.
-Bueno, al parece los vecinos ya saben que estás aquí - dijo mi padre mirando por las ventanas y miré notando a varias personas del vencidario.
-A que no sabes- miré a mi madre - JeonHo el hermano de Taehyung es fan tuyo - reí de lado.
-Debe de estar grande - asintió.
-Es todo un hombre, trabaja junto a su hermano en la floreria- divisé aquel local y sonreí al ver a Taehyung hablando con una pareja mientras les entregaba un ramo de floces.
-Creo que deberías de salir, hija y saludar a los vecinos - asentí y salí de la casa.
-Omo- hice reverencia a los presente - Zenda, hace mucho no te veíamos-
-¿Cómo han estado?- todos eran vecinos que conocía bien.
-Estás más guapa en persona- solo sonreí haciendo reverencia para seguir saludándolos.
-¡Hola!- un chico se acercaba corriendo a mí, había salido de la floreria. Cerré la puerta del auto tomando mi móvil, ya los vecinos habían vuelto a sus casa.
-Hola- abrí mis ojos de más cuando me abrazó.
-Oh, lo siendo, lo siento- hizo más de una vez reverencia - Soy JeonHo - se señaló empezando a tartamudear
-Ah, hola, no te reconocí, que grande estás- él volvió a abrazarme y reí.
-Perdón, perdón, pero, no me creo que estés aquí - sonreí y asentí - ¿Me podrías dar un autógrafo? O no, mejor una foto, pero de seguro no puedes, me conformo con que me pellizque aqui para ver si no sueño - no sabía que el hermano de mi ex novio fuera tan fan mio.
-Deja de ser tan patético - y aquel chico se hizo presente pellizcando a su hermano- Comportate -
-Ah, Hyung, duele - lo había agarrado por la oreja y solo por unos segundos su mirada se entrelazó con la mía para luego arrastrar a su hermano de vuelta a la tienda.
Apreté mis labios mirando la pantalla de mi teléfono el cual tenía cientos de llamadas y mensajes.
Mordí mi labio y decidí entrar a casa se mis padre, nada me hará regresar a Seul, no por ahora.
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