El Último Girasol

Capítulo 5

Erick tomó su cabello con una mano y comenzó a guiar su cabeza de adelante hacia atrás, con fuerza, tanta, que lastimaba su garganta.
__ respiraba con dificultad, en cambio, él estaba a nada de terminar.
Cada vez gemía más rápido, igual que el latir de su corazón aumentaba.
Dio una última estocada a su boca y jadeó en bajo al llegar a su orgasmo.
Soltó suavemente su cabello y sacó su miembro de la boca de __.
Llevó su pulgar a su labio inferior y limpió una gota de saliva que estaba en él.
La tomó del mentón y la hizo levantarse.
Acomodó su bóxer y su pantalón y besó su mejilla.

E: Descansa, mi amor -susurró sobre sus labios- Te amo.

Sin más que decir y sin esperar respuesta, salió de la habitación de __.
¿Ir a dormir? Para nada. De hecho, la chica con la que bailaba en el bar, aún lo esperaba. Él volvió a aquel lugar, siguió bailando con ella, claramente la besó y también, tuvieron sexo en su auto.
Lo hacía bastante seguido, tal vez tres o cuatro veces a la semana. Con distintas chicas, con chicas que tal vez no volvería a ver, con chicas que apenas conocía.
Ella lo sabía, bueno, no sabía con quién, ni cuándo, pero lo había visto unas cuantas veces.
Temía enfrentarlo. Temía su reacción. Temía perderlo.

...

C: Hey -dijo cuando se sentó en su lugar, ella no hizo caso- Hey -repitió un poco más alto- __ -ella volteó algo molesta-
__: ¿Qué?
C: Debo decirte algo.
__: Que sea rápido, por favor.
C: Bien... Yo... Ayer, después de que te fuiste con Erick. Él regresó al bar.
__: ¿Y?
C: Y... Estaba con una chica... Se estaban besando.
__: Eso no debería ser asunto tuyo.
C: ¿Estoy diciendo que tu novio te fue infiel y dices que eso no es asunto mío?
__: Sí, Vélez, es lo que digo -volteó-
E: Hey, amor. Buenos días -dijo unos minutos después mientras se acercaba a ella-
__: Hola -sonrió y se levantó para saludarlo-
E: ¿Cómo dormiste?
__: Bien ¿Tú?
E: No pude dejar de pensar en ti toda la noche.
__: Tampoco yo.
E: ¿Salimos esta tarde? -ella asintió-
__: Sería increíble.
E: Te espero en mi auto a las cinco, iremos a ver a mis padres -se acercó a su oído- Ponte bonita -susurró-

...

E: Hey, Christopher -le dijo cuando ya todos habían salido de la clase, él volteó-
C: ¿Sí?
E: ¿De qué... hablabas con __ ayer en el bar?
C: Oh... De ti.
E: ¿Ah, sí?
C: Sí.
E: ¿Sabes? Creo que es mejor que te alejes de ella.
C: ¿Por qué?
E: Bueno, ella es mi novia.
C: Eso lo sé, pero no creo que sea algo malo que ella tenga amigos -Erick soltó una pequeña risa-
E: Sí... Sí, pero no creo que te guste quedar fuera del equipo de futbol americano ¿O sí? -sonrió de lado, Christopher tensó su mandíbula- Bueno, a la final es tu decisión... Te veo luego -golpeó ligeramente el hombro de Christopher con su puño y salió del salón-

...

E: Te ves hermosa, como siempre -ella sonrió- Yo... Lamento lo que sucedió anoche después del bar... Creo que me puse algo violento y... Te traje esto para arreglarlo -ella tomó el ramo de rosas-

Sus flores favoritas, eran los girasoles. Él lo sabía, pero a pesar de eso, nunca le había regalado ni uno solo.

__: No fue nada, Er -dijo en voz baja y se acercó a él-
E: ¿Está todo bien, entonces? -ella asintió- Te amo.
__: Yo te amo a ti -besó sus labios-