Capítulo 4 Desesperación

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•P.o.v Tomlinson•

Aparté la mirada, ese ojiverde me tiene loco, lo más mierda es que no puedo hablar con él, me gana el panico y no se que mierda hacer, debe creer que soy in inbecil, un cobarde. Hoy noto diferente a Harry, sus ojos no brillan como siempre, se ve pálido, tiene ojeras y no se ve de buen humor, lo que daría por hacerlo sonreír aún con mis chistes más malos.

Volví a mirarlo, miraba hacia la ventana, estaba más pensador que otros días y no nos habiamos dedicado miraditas en toda la mañana, ojalá me mirara en este momento, amo cuando lo hace

•P.o.v Styles•

Se acercaba la última clase, estaba nervioso, no quería ver a Malik, no después de lo que me hizo

-Niall...- me gire para verlo mejor

-Mmm...- dejo su lápiz y me miro

-¿Me darías uno de tus abrazos reconfortantes? lo necesito ahora - dije casi al borde de las lagrimas

Él me miró prepcupado, se acercó a mi y me abrazo de la forma más maternal y reconfortante, en verdad necesitaba miles de estos abrazos, quería llorar pero sería exponer demasiado lo que me pasaba.


•p.o.v Tomlinson•

Mire la escena con rabia, ese debería ser yo no aquella rubia. Había tronado mi lápiz de la molestia que tenía.

-Tomlinson..¿estas bien? - pregunto Liam a un lado de mi

-Si, todo genial - dije con sarcasmo, miré hacia otro lado evitando las ganas de aventar al rubio y abrazar a Harry lo más fuerte posible.

El profesor Malik entro por la puerta, saludo a todos y miro específicamente a Harry con una sonrisa ¿acaso se volvió su alumno preferido?

Quería que esto terminará ya, quería cerrar mis ojos y desaparecer en este instante, o mejor, desaparecer a Malik, ¡maldita sea la vagina que lo trajo al mundo!. Mi mejilla estaba contra el escritorio, como todos los jueves y viernes Malik estaba disfrutando al máximo de mi trasero.

Habían pasado 2 meses en que Malik abusaba de mi, jamás dije una palabra, me acostumbre a que siempre saliera al último, cuando todos mis compañeros ya se habían ido a casa, Horan sospechaba algunas veces, me preguntaba por que siempre me quedaba al último con Malik, como todo un cobarde que soy le respondía que era para trabajos extra y que en su clase no presto mucha atención.

Y era verdad, no podía estudiar nada por lo nervioso que estaba al saber que se acercaba el final de la clase y que Malik volvería a violarme, tenía miedo, miedo a decirle a alguien y que Malik se enterara y me lastimara más de lo que ya lo ha hecho.

Término encima de mi como todas las veces, ensuciando mi espalda con su asqueroso semen caliente, no dije una sola palabra, seguía sintiéndome sucio, ultrajado, seguía sintiendo ese vacío en mi corazón y ya no sólo era en mi corazón era en toda mi vida, mi vida se arruinó gracias a Malik.

Me levanté del escritorio, tome mis bóxers del suelo, me los puse, busque mi pantalón y mi camisa, cuando los encontré me los puse con cansancio y como si fuera algo rutinario que marcaba el fin de mi vida, Malik terminaba de acomodarse bien el cabello.

Ya vestido y más o menos arreglado camine a la banca justo delante del escritorio, tome mi mochila y me la puse sobre la espalda, Malik se acercó a mi.

-Hoy lo hiciste muy bien bebé - sonrió y me tomo de las mejillas para besarme, no le correspondí

Mire su rostro, ¿como es que una persona que puede verse simple puede hacer tanto daño

-¿Ya puedo irme a casa? - dije en un susurro sin ganas

-Ya bebé, te veo mañana - beso mis labios nuevamente

Me había convertido en su puta personal...

Llegue a casa, mis padres estaban en el trabajo, deje mi mochila en el sofá, fui directo a la cocina, mamá guardaba las botellas de alcohol en un gabinete aislado de todo lo demás, tome la ue fuera y subí las escaleras en dirección a mi habitación, ya dentro deje la botella en mi cama, camine hasta uno de mis cajones, entre todas mis cosas personales, saque una pequeña navaja, me quite la camisa, los pantalones y los bóxers.

Me sentía sucio, como siempre y siempre sentiré eso, tenía asco por Malik. Tome la botella y la navaja, entré al baño, llene la bañera de agua caliente, ya lista me metí dentro junto con la botella y la navaja, la había dejado en una pequeña esquina que sobresalía de la bañera, tome la botella y la destape.

Primer sorbo

sentía coraje dentro de mi

Segundo sorbo

me sentía sucio

Tercer sorbo

tenía mi alma hecha mierda.

Cuarto sorbo

quería morir ahora mismo, oh mejor, matar a Malik.

-¡Maldita sea la hora en que apareciste en mi vida Malik!

Las lágrimas de dolor, coraje y tristeza yacían sobre mis mejillas empapando mi cara, tomé la navaja, la mire decidiendo acabar con mi vida ahora mismo, jamás había sentido tanto odio y coraje por una persona, Malik se lleva el premio gordo.

Suspiré, no acabaría con mi vida, eso sería ser un cobarde y yo ya no sería un cobarde, sería fuerte, así era como tenía que hacerme,mire mis tobillos, puse mi mano en ella y con la otra lentamente me pasaba la navaja sintiendo ese escozor al cortar mi piel, ardía con el agua pero la sangre comenzaba a salir, hice varios cortes más en ella, deje la navaja donde estaba, volví a tomar la botella y a tomarme toda mientras miraba hacia la pared sintiendo el escozor en mi tobillo.

Eres | Larry Stylinson | Primera temporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora