Angry Birds Regold.

<<11. Spying on Meetings.>>

-En la casa del árbol 07:30pm-

Después del encuentro que tuvieron los chicos, con el adinerado pájaro Neider Flyer, siguieron con sus que haceres y nada importante ha pasado, de momento.

Nos ubicamos nuevamente en el comedor, lugar en donde todos estaban reunidos, ya que iban a servir la cena; Chuck y Stella estaban sentados en la mesa, hablando del plan que realizaron hoy en la mañana.

Stella: Así que...¿tengo que ir yo, a espiar a mi ex amiga, sólo para obtener información, que le va brindar Neider Flyer?

Chuck: Sip, es básicamente lo que tenes que hacer.

Stella: ¿No podías ir tú acaso?

Chuck: Nop, porque tengo un grave problema de nerviosismo, cada vez que estoy oculto de las personas, me pongo nervioso y terminó saliendo de mi escondite. 😅

Stella: ¿Y no podías mandar a los demás muchachos?

Chuck: Je je, pues...

El canario mirá a sus amigos y ve como ellos hacen destrozos en la mesa, mientras esperaban la cena.

Chuck: Digamos que el sigilo no va con ellos y cómo tú no tienes ese problema, pues eres perfecta para eso. 😁

Stella:*Molesta* Vaya, que conveniente.

Mientras ellos hablaban, llega Dahlia vestida de sirvienta, a servirles los platos de comida a sus amigos, claramente tenía una expresión de molestia al usar este traje.

Dahlia:*Avergonzada* Bien, tomen sus platos de comida, chicos.

Ella les deja sus respectivos platos a sus dos amigos, mientras Chuck se burló de su amiga científica, por vestir de sirvienta.

Chuck:*En tono burlesco* Hey Dahlia, no te queda mal ese traje. 😆

Dahlia:*Avergonzada* Mejor cállate y come.

Chuck: Ja, como digas.

Chuck agarra su plato de comida y empieza a devorarla, mientras que Stella sólo procedió a comerse su respectiva cena.  Unos minutos después, todos ya estaban comiendo tranquilamente, hasta que de repente, escuchan unas leves pisadas fuertes en el sitio, así que dejan de hablar y miran en sus alrededores, quién era él que llegó a la sala.  Pará sorpresa de todos, se trataba de Red, él quien había llegado, así que Stella va a saludarlo y llevarlo a su respectivo asiento.

Stella:*Feliz* Ja ja ja, por fin saliste Red.

Red:*Desanimado* Si, si, ya salí de mi casa.

Stella: Déjame llevarte a tu asiento.

Red: No gracias, yo iré a sentarme.

Después de haberle dicho eso, se dirigió a su asiento, los chicos al mirarlo nuevamente, se quedaron un poco callados, ya que se sentían incómodos por alguna extraña razón cada vez que lo veían. Cosa contraria con Bomb y Chuck, ellos al ver nuevamente a su amigo, van a saludarlo.

Bomb:*Feliz* Así que por fin decidiste salir. ¿Eh?

Red: Si, es que tenía hambre.

Chuck: O saliste por qué te lo dijo Stella, no? 😉

Red al escuchar lo que dijo su amigo amarillo, se quedó callado y se sentó en su asiento, esperando su respectivo plato de comida.  Bomb para romper este silencio incómodo que provocó Chuck, le dice lo siguiente a su rojizo amigo.