✨ENREDADOS✨© [En Edición]

✨Capítulo 1✨

«Aubre Stevens»

Siempre he creído en la teoría del “Tren”, fue algo que escuché hace ya un tiempo, después de eso me puse a pensar como siempre hago, intentando encontrar un sentido.

La teoría del Tren, habla sobre el primer viaje, tú, rodeado de todos los seres que amas, feliz, deseando llegar a tú próximo destino. Pero a cada segundo que el tren avanza y se detiene, ves como las personas que amas se van quedando en todas las paradas mientras que tú aún no encuentras tu sitio. Poco a poco, comienzas a quedarte solo, pero ves como nuevas personas suben a ese tren y te hacen compañía, las conoces y se vuelven a ir. Así sucesivamente hasta que te toca a ti, pero en ese largo recorrido conociste tanto, obtuviste nuevas experiencias y un pensamiento diferente.

La vida, era ese Tren. Un día estás feliz, rodeada de todo lo que te gusta y amas, y al otro, estás sola, buscando compañía o intentando huir de ella. Y todo, esperando por lugar en el cuál quedarte. A veces pocos llegan a su destino, se rinden y se quedan a mitad del viaje, yo me estaba quedando en ese último sin deseos de seguir buscando, conociendo y soñando con lo que me podía encontrar en la última parada.

«Todos nos cansamos de viajar, de observar por una ventanilla el tiempo pasar, solos, ahí sentados buscando un equilibrio para tu propia vida.»

(...)

—¡Aubree!

—¡Ya voy mamá!—alcé la voz para que mi madre escuchara

—¡vas a llegar tarde!

No era nada nuevo para mí.

Bajé las escalera corriendo mientras colocaba mi mochila a mis espaldas. Al salir a la entrada, cerré la puerta y atravesé el corredor que estaba un poco húmedo por el rocío de la mañana. Allí estaba mi madre, en su auto esperando por mí. Seguidamente me subí al asiento trasero y mi cara hizo una mueca un poco incrédula.

—no se supone que la señora Molly los lleva al colegio

—si, pero su nieto está enfermo en el hospital

—vale, espero que se mejore—dije empujando a uno de mis hermanos—Aston no comiences por favor

—hermana, si sigues cortando tu cabello te quedaras como él tío Jhon—una carcajada escapó de los labios de mi hermano Ares

—que graciosillos, no puedo con su sentido del humor—les dije mirando a mi madre—mi cabello es cosa mía, vale

—pues tú con tus cosas, hermanita—dijo Ares antes de golpear a Aston

—no los aguanto

—¡Bree!—y si, mi madre me riñe por todo

Ignorando mi alrededor, me puse mis audífonos y puse mi preciada música de Olivia Rodrigo, dando paso a un mundo inaudito.

(...)

El último año de preparatoria había comenzado y no era nada agradable, como es lógico, casi siempre hay nuevos ingresos de nuevos estudiantes de primer año y bueno, son caras desconocidas a las que adaptarse y no es para nada "acogedor".