— Eres imposible Sofí — responde Carlos para no seguir angustiado a su amiga.

***

Ya Jorge estaba trabajando de lleno en el plan de mejora de la empresa en conjunto con Sofía y Carlos.

— Creo que ampliar los productos a otros tipos que no sean solo pescados y mariscos, hará crecer la empresa. Ya tienen la marca y el prestigio. Esto los colocará en otro mercado y los productos que ya tienen, serían más populares. — comenta Jorge al mirar la computadora.

Sofía levanta la mano para tomar la palabra.

— Yo ya propuse eso, pero la junta directiva lo rechazó por ser inviable

— ¿Qué era?

— Trabajar con productos del campo. Abarcaríamos todo lo que sea envasado y congelados de frutas y verduras.

— ¿Tienes ese proyecto? — pregunta Jorge, acomodando sus gafas de lectura.

— Sí... iré por él.

Sofía, durante esa mañana, nuevamente expone su trabajo que presentó hace más de 2 años. Jorge seguía atento a la exposición y revisaba las proyecciones que Sofía realizó en esa oportunidad.

— Carlos. Necesitaré que trabajes para crear un nuevo logo para la empresa — comenta Jorge — Si queremos presentar esto, ya no puede ser ondas marinas, tiene que abarcar campo, mar y ganado. Creo que, si esto prospera, en 10 años se puede incorporar la industria ganadera, así la compañía crecerá más de lo que esperaban y su empresa comercializará no solo a ser envasados, sino que a línea completa de alimentos. En vez de exportar, podrán tener sucursales en otros países, eso disminuirá el coste por exportación y serán una multinacional.

— Si puedo, pero es una apuesta arriesgada, se podría perder mucho si sale mal, incluso la quiebra — dice Carlos, frotándose la nuca ante esta propuesta

— Creo que por eso no quisieron tomar este proyecto. Se requiere de fuertes sumas de dinero para iniciar con agrícola. — interviene Sofía.

— Ustedes tienen ese dinero, no lo han invertido en nada, por eso la empresa no crecerá, se han mantenido en zona segura por años. — insiste Jorge.

— ¿Modificarás mi trabajo?

— No, en nada. Está perfecto, lo presentaremos ambos a los CEOS.

— ¿Y por qué crees que ahora lo tomarán en cuenta? — interroga Sofía.

— Porque estaré yo. — Jorge da un suspiro y entrecruza sus manos en señal de dar malas noticias — Sofía, sé que no te gusta escucharlo, pero nadie quiere apoyarte, porque eres hija de tu padre y él no confía en ti.

Sofía mira sorprendida a Carlos y este le hace un gesto de que Jorge tenía razón.

En una semana, pulieron el trabajo de Sofía, Carlos incorporó un nuevo prototipo de logo, que se vería más adelante, y expusieron el proyecto a los 4 altos directivos, incluido el padre de Sofía.

Al terminar, los directivos discuten estas propuestas. Era algo grande, pero de salir bien, la recompensa sería increíble.

— Se debe invertir mucho dinero, crear las fábricas para esto, ver el tema con agricultores — comenta uno de los directivos.

— Ya lo tengo evaluado. La empresa "campo del sur" está en números rojos por años, caerá en quiebra en un año. Pueden adquirirla, como ellos han trabajado con los agricultores, la mayoría del trabajo estaría hecho. — expone Jorge.

Vuelven a hablar los directivos entre ellos. Les gustaba la idea, sonaba muy fácil, casi obvió, y aún tendrían al asesor por cuatro meses para que siga trabajando en esto.

— Jorge, lo que me inquieta, es que deberemos modificar completamente nuestra forma de trabajar, es un área nueva y no sabemos nada de ello — comenta el padre de Sofía.

— Federico, cuando esta empresa la creó su padre con sus socios, tampoco sabían cómo iniciar. Eso se aprende, solo se debe creer en el proyecto, así como lo hicieron ellos en su tiempo. ¿Ustedes quieren creer en el proyecto? O ¿se mantendrán perpetuamente persiguiendo a la gallina de los huevos de oro?

Federico Mydffai, golpea la mesa en señal de aprobación y el resto de los socios aplauden.

— Me gusta esa actitud. Vamos a atrapar esa gallina...

Todos se acercan para felicitar a Jorge y esperar que siga con este proyecto que los llevará a la cima. Por su parte, Sofía se marcha del lugar, mientras los directivos seguían emocionados por el proyecto.

No era justo, aquello era su trabajo, y otro tenía el crédito por él, pero Jorge tenía razón, a ella no la respetaban y quizás nunca lo hagan.

Mi único pecado, fue quererte.Where stories live. Discover now