«𝙰𝙳𝙽 +𝟷𝟾»

Ꮲꮋꮻꭼᏼꭼ Ꮇꮖꮮꮮ

No tuvo más remedio que repetir, encima sus compañeros de clase no eran muy amables con ella. Se metían con ella por su peso que cabe mencionar que tras el suicidio de su madrastra no supo como afrontar ese problema y encontró refugio en la comida. Solo comía y comía para evitar cualquier problema, era su zona de confort el comer. Le satisfacía pero ello estaba acabando con su movilidad y su salud. Y por si no fuera poco no solo se metían con su peso sino también con su origen.

- Pero mira a esa gorda de mierda.

- Si tía, parece más una ballena que un humano. Encima es de por ahí.

- Puta panchita que seguro ha venido sin papeles y a quitarnos el trabajo.

- Te puedes volver a tu puto país y eso.

Ese tipo de comentarios los tuvo que aguantar durante 6 meses para luego repetir curso. Y cuando llegaron las vacaciones de verano, decidió meterse a un gimnasio para no seguir el mismo patrón. Salió de su rutina por una mejor, en ese mismo verano descubrió que su padre trabajaba de camello porque legal no podía trabajar. Se dió cuenta por un paquete de hierba que había en el mesón de la cocina y obviamente su curiosidad no se hizo esperar y probó un poco cuando de repente sintió la magia. Se fumó un porro bien cargado de marihuana. Y toda la tensión que tenía, los problemas, el rencor que le tenía a todos sus compañeros, sus pensamientos negativos todo aquello desapareció por completo con solo una calada.

Era feliz, ella estaba feliz sin ningún motivo. Solo sonreía y miraba al techo. Encontró una nueva manera de evitar los problemas, sin preocupaciones, relajada, sus músculos dejaban de hacer fuerza, sus ojos se iban tornando a rojo por cada calada que le metía, el humo que soltaba lo respiraba como si fuera oxígeno, sentía que por primera vez estaba flotando a la deriva en el mar, no tenía que esforzarse en ningún sentido, estaba allí parada disfrutando ese maravilloso regalo que pensó que cayó del mismo cielo. Así se pasó todo el verano, emporrada hasta las venas. Su padre sudaba de ella ya que él se metía cosas peores, y sabía que su hija lo sabía así que no tenía derecho a reclamar por lo que estaba haciendo su hija.

Llegando septiembre empieza el nuevo curso como repetidora, pero está vez no iba a ser como el año anterior, había aprendido la lección y su objetivo este año era ser la mejor. Volvió con la cabeza en alto y supo que este año les iba a demostrar a todos quién era ella y porque le tenían que tener respeto. Convertirse en la más popular iba a ser complicado pero ella solo necesitaba no pensar mucho y ser feliz.

En el nuevo año conoció a muchas personas que le cayeron bien, normalmente suelen tener la imagen del repetidor como alguien chungo y malo, pero con ella no, vieron que era una chica muy amigable y que se reía por todo, no tenía problemas y siempre era muy amigable. Conoció a su mejor amiga Úrsula que era un año menor pero se llevaban como uña y carne. Luego conoció a Nell que era un chico Alemán que se mudó de allí a España y a Rina que era muy amable con ella y sufría del mismo racismo que ella. Pronto los 4 establecieron una gran amistad.

En 4° de la ESO su grupo aumentó a 6 conociendo a J.M. un repetidor que cayó al año siguiente en la clase de Phoebe y su grupo, y también a Frank que era de la edad de Rina y Úrsula, que vino de intercambio y les tocó ese año con ellos. El último año de la ESO afortunadamente les tocó juntos y, a pesar de todo Phoebe les tenía mucho cariño.Era su familia.

Phoebe estaba en el momento más feliz de su vida junto con sus amigos a los que quiere mucho. Pero quería a alguien de más, concretamente sentía algo por Úrsula. No sabía si sentía algo romántico o quería experimentar con una chica, pero no quería sobrepensarlo mucho así que evitaba pensar con unos cuantos porros...como de costumbre.