•『 ✶ Raro lindo ✶ 』•

ꗃ ։ 17

Era irónico saber que por quedarse hablando con su madre salió unos minutos más tarde que lo habitual, por ende, cuando llegó al colegio, en la entrada estaba Changbin con su grupo de amigos.

Siempre salía temprano para evitar cruzarse con ellos, pero hoy, después de tanto tiempo, que tenía una charla íntima con su mamá, hoy que desayunaba con la compañía de su madre terminaba saliendo un poco más tarde.

Agachó su cabeza comenzando a caminar hacía la entrada, deseando que no se den cuenta de su presencia.

La había pasado tan bien el fin de semana, que se olvidó por un momento de esta realidad, de esto que enfrentaba todo los días.

Pasó al lado del grupo, y se sintió aliviado al no escuchar alguna burla o algo que indicará que podrían hacerle algo.

Pero su alivio duró tan poco que ni siquiera pudo disfrutarlo.

Fue un momento, en donde perdió el equilibrio al ser empujado y en segundos ya estaba en el suelo, teniendo en frente suyo a Changbin y su grupito.

——Dijiste que no eras gay ——reclamó Changbin.

Minho no dijo nada.

——Eres un maldito closetero, y cobarde.

——¡No me gustas, ni me gustaste! ——exclamó Minho alterado ——. No importa si soy gay o hetero, el problema es que no me gustas, no me vas a gustar.

Minho lo miro fijamente, teniendo el valor para enfrentarlo, pero este se fue rápidamente cuando le doy una patada en su rostro, lastimando su nariz.

Los amigos de Changbin no estaban entendiendo lo que pasaba, parecía haber un quiebre en la historia que Changbin les había contado.

——¡Hey, hey! ——gritó Jeongin, corriendo hacía donde estaba el grupo ——. ¿Qué mierda te pasa? Déjalo en paz, loco.

Jeongin empujó a Changbin, para acercarse a Minho y ayudarlo a levantarse.

——Llegó el defensor de pobres —— dijo Changbin con un tono burlesco.

——Cállate gil, tenes que venir en grupito para ser malo. —— Jeongin se paró, para enfrentarlo.

——¡Ya va a tocar el timbre! ——exclamó un preceptora, sin prestarle mucha atención a lo que sucedía.

Changbin junto a su grupo se fueron, empujando a ambos chicos cuando pasaron por su lado.

——¿Estás bien?

——Lo quiero matar, lo odio.

Jeongin lo abrazó, tratando de tranquilizarlo, ya que él estaba muy alterado.

Minho solo quería que paren, quería que todo eso acabe. Sé arrepentia, si pudiera volver al pasado hubiese hecho las cosas diferente, hubiese defendido a Changbin, y quizás rechazarlo de una forma menos ruda.

Quería estar en paz.

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