Minutos después se inclinó hacia adelante, apoyando sus manos en el suelo. El dedo del mayor salió de su boca, un hilito de saliva uniéndolos. Su camisa terminó de desabotonarse al completo debido a su movimiento.

Mírate. Estás hecho un desastre.

Ugh... —Tae levantó la cabeza y le dedicó al pelinegro una enfadada, pero a la vez avergonzada mirada. Limpió sus empapados labios con la manga de su camisa.

Bueno, esto duele como la mierda. —alzó la voz Jungkook, comenzando a desabrocharse el cinturón— No serviste ni para decir una frase de mierda, Kim.

Los ojos de Tae se abrieron como platos al observar cómo desabotonaba tu pantalón y su gran erección palpitaba contra su ropa interior. Era jodidamente enorme.

Verás, hoy me dijeron algo muy interesante —volvió a tomar el rostro del chico con su mano y lo hizo mirar hacia arriba, cruzando sus mirandas.—"Las bocas de los hombres son más grandes que las de las mujeres"—dijo, tratando de imitar la voz de Lucas, con una mueca burlona en su rostro.—Lo comprobaré contigo.

Tae no sabía que demonios estaba pasando. Su cabeza daba vueltas y no podía pensar con claridad. Bueno, lo único que sabía era que estaba caliente.

No era la primera vez que se sentía así y todo era debido a Jungkook: el idiota que lo había humillado a principio del curso y del que quería vengarse por ello.

Pero el enorme odio y la lujuria que sentía por él eran casi equivalentes.

Jungkook se quitó su camisa. Tae tragó saliva al ver cómo sus abdominales y bíceps se marcaban con sus movimientos. La mano del azabache agarró la tira de su ropa interior y la bajó. Su duro miembro salió con fuerza, como si de un resorte se tratara. 

Un jadeo salió por los labios del mayor al haberse liberado de la molesta prenda de vestir. Posó su mano en los cabellos rosados del chico y lo acercó hacia él. Notaba su cálida respiración contra su piel y estaba comenzando a molestarse.

Ya sabes lo que tienes que hacer. —tomó su miembro con la otra mano y comenzó a masturbarlo lentamente. Lo acercó a sus labios— Lámelo.

Taehyung lo miró a la cara sin expresión alguna. Odiaba cómo sus ojos y su sonrisa soberbia expresaban lo expectante que estaba y también
odiaba admitir que eso le excitaba.

Lo odiaba tanto. Pero en ese momento la balanza se había inclinado hacia el deseo.

Y antes de que se diera cuenta, ya había sacado su lengua y comenzado a lamer el gran miembro del azabache.

Lamía de arriba abajo, pasaba su suave lengua sobre las marcadas venas, lentamente.

Escuchó un gruñido del mayor, quien había estado extrañamente callado desde que empezó. Continuó succionando y lamiendo, algo torpe.

Oye —habló al fin, con un tono juguetón—Apestas en esto.

Taehyung frunció sus cejas ante su comentario. Detuvo los movimientos de su lengua y abrió su boca. Introdujo el miembro del mayor en su cavidad bucal, con dificultad. No podía con toda su extendión.

Lo sacó y volvió a repetir, esta vez cubriendo con su mano la parte que no llegaba y masturbándolo a la vez.

Tú... cuidado con los dientes. —habló Kook, pasando la mano por su rosado cabello y colocando un mechón tras su oreja. Estaba algo sorprendido.

—¡Tae! ¿Estás acá? —se escuchó una lejana voz, en la misma planta en donde se encontraban. Taehyung abrió sus ojos y alzó sus cejas con fuerza cuando lo reconoció; era Lucas. Se puso muy nervioso, desde luego que no quería que lo pillara con el azabache ahí, mucho menos en esa situación.

Solo 1 nude | kookv auDonde viven las historias. Descúbrelo ahora