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"Estimado señor Tomlinson, ¿sería tan amable de recibirme en su oficina al terminar las clases? Necesitamos ponernos al corriente sobre los eventos que sucederán este mes."

-Atte:HhEe

Tres semanas habían pasado desde que decidieron que aquello seguiría sucediendo, semanas donde Harry llegaba tarde a casa por quedarse en la oficina del director "planeando eventos para la escuela".
Realmente era una fachada para que sus amigos no se cuestionaran el hecho de que era llamado constantemente a la oficina del señor
Tomlinson y pasaba largos datos ahí.

La realidad era que no planeaban absolutamente nada, excepto como
Louis lo follaria y en que posición.

Ahora tenía la responsabilidad de en realidad planear algún evento y dar validez a sus excusas, así que ese viernes después de las clases, Harry se reunió con Louis y por primera vez el menor no tenía intenciones de terminar enredados en el suelo, sillón o escritorio.

—Podríamos hacer un evento de actividades, donde demuestren sus habilidades... ¿que dices?— pregunta Harry sentado en el regazo del mayor, quien estaba perdido besando su cuello y tocándole las piernas recorriendo hasta los glúteos por debajo de su falda.—¿Estás poniéndome atención?

—Lo que tengas en mente esta bien para mi— contestó aún escondido entre el cuello de Harry, pasando su nariz por la zona y apretando la carne de sus muslos entre sus manos.

—Louis, se supone que tú eres el director, el que debería decidir estas cosas..¡Auch!— siente una mordida en la parte de sus clavículas seguido de la sensación de succión. Estaba haciéndole un "chupete".

Últimamente una de las cosas que más le gustaba hacer a Louis era marcar a Harry con mordidas y chupetones por todo el cuerpo, su parte favorita siempre eran las clavículas y la parte interna de sus muslos.

—Dejemos esto para después, ahora quiero besarte...— dijo sacando la cabeza de su escondite favorito subiendo sus manos hasta la cintura de Harry.—...déjame besarte, por favor.

El tiempo que pasaron juntos en la oficina de Louis o su auto les sirvió para entablar conversaciones luego de tener sexo, poco a poco fueron añadiendo mimos, besos robados y risas compartidas.

Una de las cosas que ambos amaban hacer era la cosa de los besos. Besos tiernos, otros salvajes con segundas intenciones, también besos dulces y suaves o algunos solo caricias entre sus labios. Les gustaba esa parte, pero empezaban a tener miedo de aquellos actos.

—No hasta que nos pongamos de acuerdo sobre que evento harás.

—Haremos—corrigió acercando su cara a la del menor, restregando sus narices mientras cerraba los ojos para disfrutar de la sensación.

—No, tu harás. Tu eres quien dirige esta escuela, yo solo soy el que debería orientarte para saber que le gusta a los alumnos y hacer un evento no aburrido, así que si me disculpas, tenemos algo que organizar.— respondió bajándose del regazo del mayor para sentarse al borde del escritorio.

Si bien era cierto que Harry quería ayudar a que las actividades no fueran aburridas, eso solo era una excusa para verse con Louis y que nadie sospechara, aunque estaba seguro que en el tiempo que llevaban teniendo sus encuentros el humor de Louis mejoró. Ya no había gritos ni cambios de menú a uno saludable, en los recesos se podía apreciar la música que los estudiantes elegían y las zonas verdes y de descanso volvían a estar abiertas durante todo el día.

Dear Mr T. Where stories live. Discover now