Encuéntrame En La Esquina Al Anochecer

Segunda Parte: Capítulo 2

No todos los duelos son iguales. Perder a alguien de forma inesperada no tiene por qué doler más que cuando la pérdida lleva mucho tiempo produciéndose. Sin embargo, el primero es un dolor más agudo. El corazón es atravesado, en lugar de ser aplastado lentamente.

En un mundo perfecto, los hijos entierran a sus padres, nunca al revés. Los primeros en llegar son los primeros en partir de nuevo. Yanli siempre esperó sobrevivir a sus padres, y es ese conocimiento el que hizo que sus muertes, por repentinas y trágicas que fueran, fueran ligeramente más soportables.

Yanli nunca pensó en la posibilidad de sobrevivir a sus hermanos.

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Cuando suena el teléfono, lo primero que piensa Yanli es que es A-Ying. Está tan aliviada que tarda un momento en preguntarse por qué llama al teléfono fijo en lugar de al móvil de Yanli.

"Busco a Jiang Yanli", dice la mujer al otro lado sin presentarse.

"Sí, soy yo", dice Yanli. "¿Quién es?" Divisa a Zixuan en la apertura de la puerta y le hace un gesto para que se acerque.

"Soy la oficial Li Zhen, de la Policía Metropolitana. ¿Es usted el contacto de emergencia del señor Wei Ying?"

Yanli empieza a temblar de inmediato; apenas puede sostener el teléfono y tiene que usar las dos manos para mantenerlo pegado a la oreja.

"S-sí", balbucea. "Sí, soy su hermana. ¿Qué le pasó? ¿Está bien?"

No le importa que sea una pregunta estúpida. No le importa que los contactos de emergencia solo sean contactados en caso de emergencia. El hecho de que la policía la llame significa automáticamente que A-Ying no está bien. Pero eso es inaceptable, así que Yanli pregunta.

"Voy a tener que pedirle que se siente, señora".

Yanli inhala y exhala con cuidado para mantener la calma, una causa perdida; las lágrimas ya amenazan con salir de sus ojos.

Se sienta en el sofá cercano y Zixuan se une a ella. Rodea a Yanli con sus brazos y la acerca.

"Señora, me temo que tengo que informarle de que su hermano tuvo un accidente esta noche. Fue atropellado por un coche. Los paramédicos acudieron al lugar en cuestión de minutos, pero llegaron demasiado tarde. Lamento decirle que el señor Wei fue declarado muerto en el lugar".

Por un momento, Yanli se queda totalmente quieta. No se mueve, no respira, no piensa. Entonces surge un único pensamiento.

"No."

No es posible, así de simple. A-Ying probablemente dejó caer su cartera en su apuro por llegar a la fiesta de A-Ling, y quien la recogió luego fue atropellado por un coche y murió. Debe ser un caso de identidad equivocada. A-Ying nunca cruzaba la calle sin mirar a ambos lados. Cuando tenía ocho años, Yanli le hizo prometer que siempre miraría, y A-Ying nunca rompería sus promesas con ella.

"No es posible", le dice Yanli a la oficial Li. "A-Ying siempre tiene cuidado cuando cruza la calle. No puede haber sido atropellado por nada".

Y sin embargo, mientras la cabeza de Yanli repasa todas las razones por las que no puede tratarse de A-Ying, no puede evitar sollozar en silencio.

"Los testigos dicen que el conductor ignoró un semáforo en rojo, señora".

La oficial Li es muy paciente. Yanli lo agradece, más tarde, cuando pueda soportar recordar la conversación sin romper a llorar inmediatamente.

En el presente, todas las razones que el cerebro de Yanli acaba de inventar por las que no puede tratarse de A-Ying se evaporan.

El conductor ignoró un semáforo en rojo.