La rubia estaba preparando algo de cena ese día, cuando el albino salió de su galería de arte y se sentó en una de las sillas de la isla de la cocina y la miro fijamente por un tiempo. La rubia si había notado su presencia pero estaba muy consentrada en la gran olla que estaba en fuego.
—Oye, Zenko—Dijo el albino mirando la espalda de la rubia y posteriormente levantándose de la silla.
—¿Si?—Dijo la rubia aún sin mirar al albino el cual se acercava por la espalda de la chica.
—¿Que haces de cenar?—Pregunto el albino al mismo tiempo que tacaba con sus manos los hombros de la chica la cual aún no lo miraba.
—Sopa de miso—Dijo la rubia aún sin mucha expresión y atención a los gestos del chico.
—¿Y crees que alcance para 3 personas aparte de nosotros?—Pregunto el albino de forma casual y aun con sus manos sobre los hombros de la rubia.
—Si, incluso va a sobrar, ¿acaso invitaste a personas?—Pregunto la rubia aún sin fijarse en los gestos del albino, quien miraba los rubios cabellos de la chica más baja que el.
—Si, espero que no te moleste—Dijo el albino a lo que la rubia lo observo.
—No me molesta es tu casa después de todo—Dijo la rubia de manera cortes.
—ok—Dijo el a lo que se retiro de ahí y fue a su oficina.
[Después]
Zenko estaba sirviendo cinco platos de sopa pero solo cuatro eran llevados a la mesa ya que ella no planeaba comer con el albino, ya que no quería sobrar en el grupo de amigos de este.
El timbre sonó a lo que el albino salió de su estudio y se dirigio a la puerta de entrada y la abrio.
—Hola—Dijo el albino con un tono alegre—Como an estado?—Dijo el.
La rubia llena de curiosidad se asomó y así pudo ver a tres hermosas mujeres, las miro con admiración eran delgadas, una más baja, otra más alta, todas de diferentes características, pero todas muy hermosas. Fue en ese momento que una de ellas, de cabellos negros y ojos azules se percató de su presencia.
—Hola, mi nombre es Suma, y el tuyo?—Dijo ella, haciendo que las otras se percataran de la precencia de la rubia.
—Mi nombre es Zenko—Dijo con vergüenza la rubia y se mostró completamente ante aquellas chicas.
—Lindo nombre, yo me llamo Makio, pero quien eres?—Dijo una de las chicas, de cabellos negros con dos mechones rubios y ojos amarillos claros.
—Ella va en mi universidad y como no tenia donde quedarse le ofreci quedarse aquí—Dijo el albino.
—Que generoso de tu parte Tengen, por cierto yo soy Hinatsuru—Dijo la última de cabellos negros y ojos violetas.
La rubia estaba sorprendida alguien llamaba a Uzui por su primer nombre.
Ya después de unos cuantos minutos habían pasado, los cinco estaban en la mesa lo que hizo que la rubia tuvo que servir otro ya que las tres hermosas mujeres insistieron en que los acompañase. Ya después de que empezarán a comer la incomodidad de las chica especialmente la de Zenko era cada vez más evidente.
—hmm...¿puedo preguntarles algo chicas?—Pregunto Zenko mientras comía, a lo que las tres chicas asintieron al mismo tiempo —¿Cuál es su relación con Uzui-San?—Dijo la rubia
—Bueno nosotras somos sus ex-novias—Respondió Makio
—¡¿Son Tus Ex?!—Grito la rubia saltando de la mesa apuntando a Uzui
—Si—Respondió el albino sin importancia dejando a la rubia aún más impactada
Ese día Zenko se quedó sin palabras hasta que se fueron las chicas y se fue a dormir.
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Holis soy la autora, se que eh estado muy ausente y ya de hace un tiempo no actualizo, así que espero ponerme las pilas con este fanfic, y agradezco mucho el apoyo que a estado recibiendo.
Chao 👋
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