One-shots y Escarios ( characters x Reader)

La sonrisa [Jeff The Killer X Victim! Reader]

¿Yandere muy leve? [Más acosador obsesivo], Gore-kink [Muy menor] y Suspenso

"Shhh, quédate callado". El hombre a tu lado susurró mientras asentías en obediencia. Tu corazón latía tan fuerte en tu pecho que te sorprende que no se te saliera y te abriera como un muñeco de trapo con costuras de trinquete. "Por aquí", susurró, "detrás de estas rocas".

Había algunas rocas grandes descansando detrás de un árbol. Con suerte, esto te mantendrá bien escondido por el momento. Tú y tu compañero que habías conocido horas antes se apresuraron en silencio a dichas rocas y se arrodillaron detrás de ellas, ustedes dos uno al lado del otro con la cabeza gacha. Tu mirada se mantuvo en el suelo, observando pequeñas rocas y los parches de tierra y hierba mientras intentabas mantener la compostura. Se te cortó la respiración cuando el sonido de las hojas al crujir y las risitas bajas de pura sed de sangre rompieron el silencio que esperabas que se mantuviera en el aire frío de la noche. Cierras tus ojos cansados, mordiendo tu labio inferior tan fuerte como puedes para no hacer un solo sonido. Estabas aterrorizado por tu vida.

24 metros

Suena cerca. Pero no demasiado cerca. Eso es bueno, ¿verdad? Bueno, por supuesto que no, pero él no está ahí. Aún. Ustedes dos escuchan los pasos que se alejan, ¿lo cual es una buena señal? Te sientas ahí esperando. "¿Crees que está-?" Intentas susurrar, solo para ser interrumpido por el sonido de múltiples hojas crujiendo, como si alguien estuviera corriendo. Te tapas la boca casi al instante cuando la voz de otro hombre habla con entusiasmo seguida de una risa enfermiza: "¡Sal, sal, donde sea que estés~!" El cantó. Sonaba tan enfermo, su voz simplemente pudriendo tus tímpanos. Algo en eso te hizo sentir el mayor temor. Fue tan horrible que solo querías vomitar. Por no hablar de su apariencia. Ya sabes cómo es él, tanto tú como tu amigo. piel blanca blanqueada, pelo largo negro - ojos azules fríos. Sin mencionar esa horrible sonrisa de Dios cortada de oreja a oreja. que dios horriblesonrisa.

12 metros

Se acercaba más y más y te sentías cada vez más enfermo. Se te hizo un nudo en el estómago mientras mirabas a tu amigo con ojos llorosos. Separaste los labios cuando tu amigo te miró con el ceño fruncido y sacudió la cabeza para indicar que no hablaría, a lo que en respuesta cierras la boca. Sollozas suavemente mientras te sientas allí y esperas a que el engendro de Satanás se vaya. Segundos de tensión embriagadora que se sintieron como horas. Una eternidad.

Ahí es cuando se vuelve silencioso. Todo queda en silencio. Ni un solo sonido de la vida silvestre, ni un solo pío de ninguno de ustedes dos. Los pasos parecieron detenerse y no hubo ni siquiera un sonido de respiración. Ni una exhalación, ni una palabra, nada. Comienzas a sentir que tu corazón se calma mientras te estremeces y te estremeces como una hoja por el trauma, la mirada de tu amigo se derrite en alivio y seguridad. Esperaste en Dios,  lo que sea que esté ahí afuera, que esta noche termine pronto.

4 metros

"¡Iiiiii TE ENCONTRÉ!" Una voz rasposa similar retumbó. La misma voz de antes. Tú y tu compañero levantaron la cabeza para mirar de dónde procedía el fuerte ruido, solo para ver una figura y una mano que se agachaba y agarraba a tu amigo por el pelo. Él grita mientras siguen más risas. Corriste hacia atrás y te arrastraste desde el lugar en el que estabas sentado, poniéndote de pie rápidamente. Tu cuerpo se retorció bruscamente para enfrentar a los dos, miedo y pánico en tus ojos. Tan rápido como comenzaste a calmarte, la adrenalina volvió a bombear dentro de ti.

"Correr..!" Tu amigo exigió: "¡Corre! ¡Corre y no mires atrás!"

No podías moverte. Estabas atrapado en tu lugar. Ojos muy abiertos, cara pálida. Eras como una estatua.

"¡Maldita sea, corre!-" El macho te gritó antes de que su garganta fuera brutalmente cortada con el cuchillo afilado que sostenía el hombre de la boca cortada. Su cuerpo cayó mientras gorgoteaba, demasiado débil para moverse mientras se desangraba. Eso solo te hizo retroceder unos pasos, el asesino saltando de las grandes rocas, aterrizando frente al cuerpo ahora sin vida que había arruinado. Tu respiración se volvió más pesada cuando tus ojos se clavaron en los suyos. Fue entonces cuando dio la vuelta y lo reservó más profundo en el bosque.

te persige

Corriste y corriste, tu cuerpo no te permitía detenerte. No tuviste tiempo para llorar o ir con tu amigo que ahora obviamente había fallecido. Solo tuviste tiempo de correr. Corre como tu vida depende de ello. Tus piernas se sentían pesadas, te sentías cada vez más débil, pero simplemente no podías parar. Algo dentro de ti simplemente no se detendría. No te dejaría. Te ahogaste cuando tus ojos llorosos empañaron tu visión. Te estaba alcanzando, casi podías sentir su aliento en tu cuello. Haces giros y vueltas bruscos, perdiéndote a ti mismo cuando el camino en el que estabas desapareció. Estabas corriendo más profundo y en diferentes direcciones hasta el punto de perderte. Pero no te importó. Tienes que salir de ahí y encontrar una forma de perder a este demonio. Estabas perdiendo energía lentamente y él no se rendía. Te estaba ganando. Él' es más rápido que tú. Ahí es cuando alcanzas un árbol grande, chocando contra él antes de dar la vuelta. No podías seguir. Respirando pesadamente, exhalando ásperamente después de cada inhalación agonizante, el macho se detiene frente a ti. Golpea su mano derecha por encima de tu cabeza en la corteza áspera del árbol, usando su mano libre que tenía su cuchillo para sostener la punta de dicho cuchillo debajo de tu barbilla. Tus ojos se encontraron con los suyos una vez más. Apestaba a alcohol y sangre. Eso solo te habría hecho vomitar si no fuera por las tres últimas palabras que te diría en un tono dulce y gentil. "Ve a dormir."

Inhalas mientras esas palabras traen un escalofrío por tu columna vertebral. Te sientes congelado como un todo cuando el cuchillo se movió hacia abajo y la punta se clavó en tu estómago. Con esto, podías sentir los labios del asesino presionando contra los tuyos bruscamente. Estaban agrietados y salados, pero sabían tan celestial. Tus párpados se cerraron a la mitad mientras fruncías las cejas, gimiendo suavemente hasta el extremo de la picadura dentro de ti. Se aleja solo por un segundo antes de mover la cabeza hacia abajo y lamer tu cuello lentamente mientras gira la hoja. Gritas suavemente. Estás demasiado débil para moverte más. De todos modos, es demasiado doloroso, pero es un poco... agradable.Pones los ojos en blanco antes de cerrarlos, desmayándote por la conmoción y la sobreestimulación en general. Ahí es cuando el asesino se ríe de sí mismo y deja el cuchillo dentro de ti, manteniendo tu figura en sus brazos mientras te levanta en un acarreo nupcial. No quería sacar el cuchillo para no dejarte sangrar. Dejará que EJ haga eso, tiene más experiencia cuando se trata de situaciones médicas como esta. "Todos estos meses, te he observado. Te he estudiado, te he anhelado, te he amado. Nunca dejaré que nadie te aleje de mí. Jamás. Mi querido T/N"