Siendo Una Princesa Disney... Pero Con Pene

5. Un Zorro Para Nada Raro

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—Oh, enserio ¡Enserio! Lo siento, pero... Soy vegano.

Fabi frunció el ceño esa declaración mirándolo con recelo. Al final habían seguido a el pequeño animal monocromático, el cual los llevó a un pequeño tronco (Su hogar probablemente) de donde había sacado un ratón. Para su sorpresa, el ratón estaba cuidadosamente cubierto por una tela vino tinto, así que cuando fue entregado a Vicent lo primer que hizo al sentirlo fue tirarlo sin siquiera pensarlo.

El animal negó la cabeza para luego dirigir su mirada a la hada, esta entró pánico.

—¡Y-yo! — Miro disimuladamente a el de vestido buscando guía, él simplemente encogió los hombros — ¡No puedo! Ya comí mucho, antes de venir a el bosque ¡Ya sabes! No puedo estar ayudando a la princesa con el estómago vacío. Ja. Ja. Ja — Rio nerviosa.

Vicent le lanzo una mirada molesta a la de alas para luego reprenderla — Ya te dije que no me puedes llamar princesa.

—Lo siento, Dome...

Puso los ojos en blanco para luego dirigir su mirada a el animal — Escucha Fabi. No te deprima, seguramente te esforzarte en cazarlo y es tu presa, y es mejor que te lo comas tú... En un lugar donde yo o la niña no te veamos, porque a mi me da asco y seguro a la niña le dejas traumas, porque tiene unos... 6 o 7 años.

—En realidad tengo 14 — Murmuro haciendo un puchero.

Vicent la ignoro y le dio unas palmaditas a Fabi, quien aún seguía algo molesta.

—Así que relaja la raja que yo buscare algunas bayas o algo por el estilo — se dio la vuelta y comenzó a dirigirse hacia unos arbustos.

Azul — ¡Dome! ¿Estas seguro? ¿Qué pasa te comes algo venenoso por accidente?

—O muero por el veneno o muero del hambre, al final me voy a morir de algo — Hizo un movimiento de mano y siguió caminando. El zorrillo y la hada compartieron una mirada no muy convencidos.

Se puso en cuclillas y procedió a buscar entre los arbustos dejando el palo a un lado,

—Oh, mira, aquí hay una — tomó un pequeño arándanos, o al menos eso supuso él — Sí me muero por intoxicación entiérrenme desnudo y quemen el vestido.

La hada se alarmó —¡¿QUÉ?

Sin poder detenerlo se metió el arándano en la boca, la hada la miro con nerviosismo esperando una reacción negativo, no vio lo que se había metido a la boca así que no puede juzgar por si misma lo que se había comido y solo podía rezar.

Vicent — Esta bueno — se volteó y le mostro otro arándano a la hada.

Azul soltó un suspiro de alivio al ver el fruto y pregunto entusiastamente — Dome, si no es mucha molestia me preguntaba si también me podrías dar algunos para mi — Al decir esas palabras fue fulminada por la mirada del zorrillo — ¡P-pero que no sean muchos! P-porque y-yo ya había comido...

El zorrillo seguía mirando con recelo a la de azul pero lo dejó pasar soltando un bufido enojado.

Vicent asintió y comenzó a buscar más en el arbustos, dejando algunos en el suelo para buscar más. Al no ver más paso al siguiente arbustos, al abrirlo para mirar más a el fondo encontró una esponjosa colita naranja. Miro con curiosidad hasta por fin reaccionar con cuidado tomando la vara de árbol que le había dado la niña, tomándolo con firmeza y levantándose lentamente.

La hada y el zorrillo miraron esta acción con confusión.

Azul — ¡Dome! ¿Qué pasa?

Vicent — Shh, hay algo ahí.