[Dos por uno]

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#SemanaDinLuke

#Crossover

#Dia04

Créditos por el arte (abajo) a: @QED Art

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Luke Skywalker sólo quería una vida normal.

Pero "normal" era un palabra que no existía para él.

No cuando tenía un terrible y oscuro secreto que por más que quisiera enterrar, olvidar por completo, le perseguiría de por vida.

Era la tercera vez que se mudaba en el año y apenas estaba en el segundo trimestre del año.

No era como si el dinero fuera algo desbordante en sus bolsillos pero alguien como él tenía que tener un perfil bajo, pasar desapercibido.

Ser invisible para la sociedad.

No podía permitirse el tener lazos, amigos o conexiones que supieran de él.

No era prudente, no era correcto.

No era seguro.

Pero para todos los demás.

Se había mudado a Londres para comenzar de cero.

Ya tenía tres meses y realmente pensaba que estaba mejorando.

Se había instalado en un viejo departamento y acudía a una Universidad sencilla. Trabajaba en una farmacia en el turno de la noche para costear sus gastos.

Está vez si quería terminar de graduarse, pero le era imposible por culpa de su situación actual.

Había encontrado a un buen terapeuta para resolver sus 'pendientes'

No era como los anteriores que sólo tomaban su dinero, le recetan pastilla que no hacían nada y fingían que se interesaban en él o en sus conflictos.

Pensó que estaba por fin avanzando, que podría continuar con su vida, pero se había equivocado.

Sucedió de nuevo. Dos veces.

Luke observó la oficina de su terapeuta en silencio.

Aquella era una habitación sencilla pero a la vez sofisticada, estaba llena de arte pero sin parecer ostentosa y exagerada.

Estatuas y pinturas realmente extrañas y normales a simple vistazo pero que si las veías con detenimiento, te podías perder en ellas.

Eso era lo que quería.

Observó el reloj en la pared con ansiedad. Deseando que el tiempo pasará más rápido para poder irse.


—Si no quieres conversar no tenemos que hacer Luke. —El mayor le comentó sin dejar de mirarlo.—Este es tu espacio. No tienes que mirarme si eso te incomoda, pero considero que estás a punto de sufrir una crisis si sigues guardando silencio.


—Lo siento, sólo...—Cerró los ojos sintiéndose mareado. — No me siento bien.


—Ya sabes las reglas, si querías cancelar nuestra cita pudiste avisar con 24 horas de anticipación.


—Lo sé, y créame que lo intente pero. —El rubio le vio con profunda calma. No, no debía de admitir que había sucedido otra vez. —Solo tenía muchas cosas en que pensar....Conocí a alguien.


—Ya veo, qué opinas de él?


El rubio suspiró y apretó los dedos de sus manos en sus rodillas.

[Oh, Force]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora