Capitulo Seis: Un mercenario...o dos

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Kamilah se estaba cabeceando mientras Layla le hablaba de lo que ella estaba enterada sobre lo que Aaron hacía en Estados Unidos todos estos años.

Sentía que su corazón se encogía cada vez que pensaba en lo que había pasado, en como su hermano la había traicionado.

Ahora se planteaba si realmente valía la pena ir a buscar a Nailah, porque ¿Que pasaría si ella también había cambiado? ¿Si después de todo, ellos ya no tenían ningún vínculo? Aunque le importara, su mente le decía que debía dejarlo pero su corazón le decía todo lo contrario.

_ Y así es como la historia se repite _apareció Seth a un lado de Layla.

¿Que hace este perro aquí? —preguntó Layla mirando al dios.

— ¿Te gusta lo invasivo que es? —preguntó Kamilah como si ya estuviera acostumbrada a que Seth se apareciera dónde quisiera, cuando quisiera.

— Deberías aprender más de Tueris —le dijo al dios, por lo que Seth la miró mal.

_ Tueris debería aprender de mi _dijo para después reír.

Layla miró hacia donde Kamilah se encontraba e hizo una mueca de desagrado.

— Si, su risa es lo peor que puedes escuchar, literal te arruina el día —dijo aguantando la risa.

_ Eres cruel _dijo Seth dejando de reír.

— Lo aprendí del mejor, gracias —movió su cabello al aire.

— Me gustaría estar sordo o no ser avatar de Khonshu para no escucharte, Seth —dijo Jake llamando la atención de Layla.

El dios iba a responderle pero Layla lo interrumpió emocionada por el cambio en la voz y actitud de Jake comparada con las de Marc y Steven.

— Si se escucha diferente —golpeó el brazo de Kamilah al hablar— ¡Es genial! —

— Layla —la miró a través del espejo retrovisor en un intento de saludo.

— Hola Jake —respondió ella.

— Hace cuánto tienes el control, Lockley —

— Me encanta que no te des cuenta, estás perdiendo el toque preciosa —apretó la mejilla de Kamilah con una mano y la otra quedó sobre el volante, pero ella le dió un manotazo, Jake se mordió el labio bajo la mirada incómoda de Layla y una mirada de repulsión por parte de Seth— ¿Y tú por qué sigues aquí? Ya esfumate —le ordenó al dios.

Seth se cruzó de brazos y miró a Kamilah.

_ ¿No le vas a decir nada? _

— Si, que tiene razón. Por ahora nosotros estamos haciendo el trabajo, tú no tienes nada que hacer aquí, bye Seth —se despidió de él con la mano.

_ No puedo creer que te siga soportando _

— Si no quieres, ya te dije que es lo que puedes hacer —

Jake la miró con media sonrisa mientras ella hablaba. Le parecía preciosa, era valiente, ruda, inteligente, no se dejaba intimidar por nadie a no ser que eso la afectara directamente. Y le respondía a un dios como si fuese un simple humano, no podía pedir más de ella.

Era una mujer perfecta para los tres. Se adecuaba a cada uno y tenía cierta parte de ellos, cosa que a los tres les fascinaba. Podía ser ruda como Jake, terca como Marc y cerebrito como Steven y eso era algo bueno muchas veces, pero otras podían jugarle en contra.

|×|

— ¿Tu no te cansas? —le preguntó Jake a Kamilah y sin ser cauteloso le dió una nalgada.

— Jake, aquí no —dijo ella entre pequeñas risas coquetas.

In the desert |× Moon Knight ×|Where stories live. Discover now