o1. the intervention

119 23 13
                                    

.・。.・゜✭・.・✫・゜・。.

ALAIA suspiró mirando al techo una vez más

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

ALAIA suspiró mirando al techo una vez más. Había noches que eran más fáciles que otras. En algunas no tenía tanto miedo y en otras era imposible de soportar. Su mente se disparaba en miles de direcciones, pocas buenas, y repasaba la historia y todos los escenarios posibles en su mente. El "que hubiese pasado si..." ya era parte de sí misma, sacar conclusiones era común y hartarse de no poder callar su mente, moneda corriente. Se dio vuelta e la cama, llevando un poco de frazada consigo y miro el reloj en su mesita de luz. 02:34 am. Suspiró, otra vez era tarde. Tardísimo.

—Buenas noches, angelito.

    Alaia pegó un grito que resonó en toda su habitación mientras se sentaba sobre la cama —. ¡Mierda, Damon! —Dijo bajando la voz.

—¡Ally! ¿Te encuentras bien? ¿Que fue eso?

    Damon la miraba fijo con su sonrisa característica, acostado sobre la cama con sus dos manos bajo su cabeza. Sus zapatos puestos sobre el cubrecama.

—¡Si ma! Solo fue un... bicho... raro —, gritó para responderle a su madre en la otra habitación.

—Auch —, acotó el, divirtiéndose.

—¿Me parece a mi o te estás acostumbrando a esto? —Alaia lo increpó, corriendo sus pies del acolchado color claro.

—Nunca tome la costumbre de quitarme los zapatos antes de acostarme...

—A entrar a mi habitación, Damon —. Lo interrumpió.

—Mmhm. Eso es muy desagradecido de tu parte ya que alguien anda por ahí llorando porque teme que un vampiro grande y feo se la coma de noche. Wraaawr —exclamó abriendo su boca e imitando unas garras con su mano.

—Déjame en paz, y no me hagas arrepentirme —contestó, dándole un pequeño golpe en su brazo.

    Damon se encogió de hombros —. Mmhm. Solo estoy cuidándote, ya sabes, los murciélagos y eso. Hombres lobo. Colmillos... Puedo irme. Se ve que estabas durmiendo muy bien —dijo con falso desinterés y esperando a que Alaia lo frene, comenzó a levantarse de la cama —Me voy a ir... Me estoy yendo. Nada puede detenerme ahora mismo.

    Alaia rodó los ojos y tomó su brazo.

—Bien.

    Damon sonrió y se tiró en la cama nuevamente con los brazos cruzados tras su cabeza.

—¿En donde quedamos?

—Abriste la tumba y Katherine no estaba.

—Oh, si —río sarcásticamente —mi humanidad hizo Kaboom —, mostró con sus manos como algo explotaba y luego desaparecía —. Que tiempos.

    Él le contaba, noche por noche, parte por parte, fragmentos de su vida pasada. La ayudaba a comprender cómo funcionaba este nuevo mundo en el que sus amigas habían estado involucradas durante tanto tiempo sin que ella siquiera lo note. Sin olvidarse de que era Damon quien le contaba las cosas, escuchaba su parte de la historia, y gracias a las últimas semanas le creía cada palabra.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Jun 15, 2022 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

memory serves | damon salvatoreWhere stories live. Discover now