Después de los tequilas me entra un poco de calor y me apetece tontear un rato con mi chica, acerco mi hamaca a la suya y una de mis manos va a su escote, mi dedo baja suavemente por su canalillo hasta su ombligo.
M.- Uhmmm ¿Qué haces?.- dije mirándola levantando la ceja
V.- No me levantes la ceja que me lanzó en picado encima de ti
M.- Ja, ja, ja, soy toda tuya
Yo seguí a lo mío... sólo el dedo índice, recorriendo su pecho, su abdomen, ya invadía su hamaca y mi boca aterrizó encima de su pecho, dejándome el lugar donde seguro estaba su pezón a mi merced.
V.- Oy, perdón...- y mi nariz y mis labios comenzaron a acariciar su pecho por encima del tetero
M.- Perdonada.- Un gemido suave brotó de mi boca, y mi abdomen se contrajo de forma involuntaria
V.- ¿Te gusta?.- dije acercándome a su oreja
M.- Me encanta, pero....
V.- Ya lo sé... estamos en la playa, tranquila Carrillo, no te voy a hacer el amor aquí en la hamaca, aunque ganas no me faltan, estas tan sexy que no se ni como me aguanto
M.- Idem cariño, pero esto tiene fácil arreglo, estrenamos la habitación.... en esa cama se tiene que follar de miedo
V.- Mónica Carrillo ha dicho la palabra follar... así sin más
M.- Me estas poniendo tan cachonda con tus jueguecitos por encima del bikini que igual te empotro aquí mismo
V.- Pero.... ¿Donde esta mi Moni? ¡Búsquenla!, la han secuestrado
M.- Ja, ja, ja, ¿Por?
V.- Follar, cachonda, empotrar.... no son tu léxico habitual Carrillo
M.- Pero... ¿Te gusta que lo diga?
V.- Me encanta, y me pone muy cachonda a mi también, ¡Vámonos!
Entramos en la habitación a trompicones, dejándonos besos a doquier, allí ya retiramos el cubrecamas y comenzamos a hacer el amor, bueno esta vez fue más follar, las dos estábamos muy calientes, no hubo prácticamente preliminares, los besos fueron con lengua desde el principio, con deseo, con sabor a tequila y cerveza, nuestras manos bajaron directas a nuestras intimidades las cuales rezumaban humedad, estábamos muy cachondas, no tardamos ni cinco minutos en explotar la una sobre la otra. Tuvieron que oír nuestros gritos y gemidos pero no nos importó en absolutos que alguien pudiera oírnos, surgió así y así lo expresamos.
M.- Uhmmm guau, Vane...
V.- Uhmm ¿Si?.- dije todavía con la voz entrecortada
M.- Abre los ojos, mira....- Las vistas de nuestra habitación eran increíbles, el ventanal de acceso a la terraza y la playa la fondo.
V.- Guau, podría vivir así toda la vida, que paz
M.- Es precioso, tu eres preciosa, ¿Qué haces ahora con el móvil?
V.- Quiero captar este momento, mi felicidad, nuestra felicidad
M.- Te amo Martín
V.- Y yo a tí Carrillo, oy oy oy.... me he dejado antes una cosa por besarte...
M.- Je, je, yo creo que me has besado enterita.....
V.- Ven aquí, me he dejado de besar tu naricilla, mi primer beso siempre es para tu naricilla
M.- Pues aquí la tienes, dale el beso y a la ducha, que ya vamos tarde a cenar....
Le dejé el beso a Mónica en la nariz, y pasamos a ducharnos, y arreglarnos para ir a cenar, la ropa muy informal, en ese aspecto compartimos la comodidad en los viajes, a no ser que toque llevar vestuario más elegante, somos más de camisetas, bermudas, sandalias y poco más.
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Siempre, 7 veces si.
General FictionSegunda parte de 7 veces siempre, seguimos con Mónica y Vanesa, su vida y su historia, eso sí totalmente ficticia.
Holbox I
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