𝗣𝗥𝗘𝗖𝗢𝗭 | j. wy + c. s

seven

San sonrió mientras continuaba estimulando a Wooyoung, comenzando a lastimarlo. "¿Cuánto, exactamente, duras en llegar?, es como... Lo hiciste muy rápido." Wooyoung sabe que difícilmente llegó al minuto y medio, sus orgasmos nunca pasan de eso. "Muéstrame, Wooyoung. Quiero ver cómo pierdes el control de nuevo."

Wooyoung tomó aire para poder hablar, mientras gemía tranquilamente, ahora San movía sus dedos lentamente y era hasta cierto punto relajante. "No tardo más de d-dos minutos, ¡ah!, ahí, oh San, ahí, San, mierda." San encontró tan fácil el punto de Wooyoung y no fue dificil seguir sobreestimulando, el mayor mordió su labio y siseó después, tenía a Wooyoung, un puto sueño húmedo andante, increíblemente guapo y buenísimo, convertido en un desastre excitante, su erección no podría estar más dura.

Sacó sus dedos y aguantó una risa cuando Wooyoung preocupado lo miró, dejó de sentir placer tan repentinamente.

Entonces San sin decir nada tomó el miembro de Wooyoung con su boca, casi se ahoga pero lo controló fácil. Comenzó a chupar fuerte, Wooyoung echó su cabeza hacia atrás, empezó a gemir desesperado, su glande era atormentado por la lengua hábil y caliente de San, su respiración estaba tan agitada y sentía su cuerpo arder en sudor.

"Sí, sí, Sannie, sí, oh." Abrió la boca para gemir libremente y accidentalmente se tragó unos gemidos al tragar saliva, pero no le importó. San chupó más fuerte y eso fue suficiente para que Wooyoung se corriera, fuerte y abundante, contrario a lo que San pensaba que pasaría.

Lo tragó todo rápido y se movió para desnudarse, logrando quitar su camiseta y pantalón en tiempo récord.

Aventó la ropa al suelo y relamió sus labios, Wooyoung sólo se hundió más en el sofá y supo que no había marcha atrás, él iba a ser follado por San, su roommate.