5- Tara

2 1 0
                                    

Llegaron a aquella cafetería, que parecía irse convirtiendo en un lugar de investigación, aunque esta vez se debía más a la negación de Tara de irse en un carro con él, aunque lo bueno es que pudo conseguir un pans y una chaqueta que llevaba por si su ropa llegaba a mancharse, lo mejor era prevenir

Pasaban los minutos, sin ninguno atreviéndose a romper aquel incomodo silencio, impaciente y aburrida de esperar Tara volteo a su alrededor buscando algo con lo que entretenerse en lo que su secuestrador se dignaba a hablar, vio a un niño dibujar, una pareja que parecían estar en una cita, las meseras estresadas, volteo hacia el ventanal, viendo a una camioneta azul, luego un carro rojo y se aburrió.

Al no encontrar nada, miro a su acompañante, en su profesión ha visto a personas de todo tipo, tanto hombres como mujeres, pero él tenía algo diferente y el simple hecho de salvarla para luego no secuestrarla lo probaba y eso la llenaba de curiosidad. 

Noto una constelación de lunares que no solo se mostraban por su delgada nariz sino por toda su cara y cuellos resaltando por su piel blanquecina y su castaño cabello, encogiéndose de hombros y al no haber nada más divertido se puso a contarlos.

1, 2, 3, 4, 5...

?

Decir que Aarón estaba nervioso y avergonzado era poco, en su vida se imaginó "secuestrar" a una posible testigo, más bien, nunca se imaginó "secuestrar" a alguien, aún si esto no contaba como un secuestro real.

No tenía idea de cuánto tiempo había pasado, minutos, horas.

A pesar de que quería empezar con ese interrogatorio, no sabía cómo hacerlo. Lo malo de haber sido tratado como el novato, es que no lo dejaban entrar mucho a ellos. Por lo que no sabía qué hacer.

Miro a la chica, notando como su pie se movía en símbolo de impaciencia, a pesar de haber visto foto de ella no era lo mismo que verla en persona.

En las fotos o videos, no podían verse aquellos rasgos asiáticos no tan pronunciados, como su nariz bulbosa se arrugaba inconscientemente cuando tomaba su café, como jugaba con su castaño cabello o con aquel singular collar de camaleón, como sus delgadas cejas se elevaban expectante a ver qué harían los demás, o como sus ojos chocolate lo miraban expectantemente con extrema concentración...

Espera que...

Espabilándose un poco la miro un poco incómodo y algo vacilante pregunto

-¿Qué estás haciendo?

-Contando tus lunares- menciono casual

-¿Por qué? –pregunto con extrema confusión

-estoy aburrida, eres un secuestrador aburrido

-no es un secuestro

-y entonces ¿Qué es?

-solo quiero que me conteste...

-contestar ¿Qué? No has hablado desde que me trajiste aquí- lo corto antes de que terminara su frase

-yo... - Aarón tenía que admitir que era cierto, pero no lo iba a admitir- y que querías que hiciera eh, que te sedara o noqueara, te amarrara y te...

No termino de hablar cuando noto como un hombre mayor que pasaba por su mesa hacia la salida, los veía con el ceño fruncido

-y no se imagina como es en la cama- le dijo Tara como si estuviera reviviendo aquel momento, haciendo que a Aarón se le tiñeran las mejillas y orejas de rojo. Aunque el hombre no le hizo caso, y solo salió murmurando algo como "los jóvenes de ahora" y "en mis tiempos"

10-17Where stories live. Discover now