- 26 -

1.1K 199 35
                                    

Alex cubrió el cuerpo de Elliot como pudo y bajó apenas vistiendo un boxer. Joseph estaba intentando leer unos papeles cuando oyó un ruido sordo.

Corrió rápidamente hasta el final de las escaleras para encontrarse con hijo hecho un mar de lágrimas con el alfa menor enrollado en una sábana manchada de rojo.

"¿Qué pasó?" Preguntó con el ceño fruncido, casi gritando. Arián llegó inmediatamente y recibió al muchacho en sus brazos, se tambaleó un poco por lo pesado que era pero pudo afirmarlo correctamente.

"No sé todo estaba bien, se desmayó y estaba así" señalaba desesperado.

"Jos, llama al médico" Arián quiso retirar la sábana pero su hijo le gruñó "¡Basta! Tú provocaste esto, Alex" vocalizó para que su hijo pueda entenderlo.

Elliot estaba pálido pero la sangre en la parte trasera de sus muslos estaba seca ya. Arián tuvo cuidado de respetar la privacidad del joven dormido.

Joseph estaba molesto pero su instinto hizo que entrara a la habitación del pelinegro para ayudar a limpiar al muchacho mientras llegaba el médico.

"Hijo, dejaste esto arriba" Joseph le alcanzó el auricular. Sacó un paño húmedo y limpio las piernas del chico bajo la atenta mirada del alfa.

"¿Mamá? Papá, ¿por qué el doctor estaba en la puerta?" Joan, que apenas llegaba, estaba asustado por su madre.

"¿Lo dejaste pasar?"

"Claro que sí, ¿Qué ocurrió?"

"Alex trajo un alfa a la casa" dijo Arián negando mirando al suelo, Joan sabía de quién estaban hablando "Tu hermano entró en celo y.. creo que entiendes"

Joan levantó ambas cejas sorprendido. El alfa rubio detuvo su andar antes de que su hijo entrara a la habitación de su hermano, quería evitar una pelea entre sus hijos. Elliot no era un omega pero despertaba el instinto de su hijo como si lo fuera.

El médico llegó y fue el único, a parte de Joseph, que pudo ingresar al lugar. Despertó al joven con una solución líquida en frente a su nariz y procedió a hacer preguntas.

"Jovencito. ¿Cómo te encuentras? ¿Sientes dolor?"

"¿Qué pasó? No, no me duele nada" Elliot se sentó de golpe y apretó el gesto, un dolor punzante subió por sus piernas hasta su espalda.

"No, tranquilo. Puedes volver a sangrar"

"¿Qué?" Buscó con la mirada a Alex y vio al alfa sentado en una esquina llorando en silencio mientras apretaba los puños con furia "Alex.."

"No pasó nada grave, al parecer tuviste.. algunos desgarros" dijo el médico tratando de sonar lo más neutral posible "En el caso de dos alfas suele suceder esto. Es bueno que no haya anudado, podría haber pasado algo realmente preocupante"

"No, él se retiró antes" dijo el alfa menor completamente avergonzado pues cierto omega había dejado la habitación.

"Bien.."

"Alex fue muy paciente, nunca me sentí mal o adolorido. Bueno.. más de lo que sería normal"

"¿Tuviste relaciones con un alfa antes?" Joseph levantó la mirada espectante. Elliot negó tranquilamente y Joseph volvió a su postura inicial "Es por eso y la situación en la que estaban que no pudiste identificar las alarmas, jovencito"

"¿Y ahora? ¿Qué pasará?" Preguntó el ojiverde.

"Debes descansar. Tu cuerpo debe recuperarse" miró al alfa en la esquina de la habitación "Nada de sexo por lo menos en tres semanas. Sugeriría unos exámenes de sangre para saber por qué palideciste"

Enséñame en silencioWo Geschichten leben. Entdecke jetzt