Té para dos [ChuuAku]

¿Celos?

Advertencias: Ninguna.

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Habían compartido té estas últimas semanas, a veces solo llevaba para Akutagawa, el mismo Nakahara los preparaba, a veces variaba las infusiones para hacerlo más entretenido, otras tantas compartían postres en la oficina del ejecutivo. Era agradable pasar tiempo juntos, su platicas consistían en escuchar a Chuuya hablar de cualquier tema, ese hombre tenía más confianza que nadie en el mundo.

Caminaba directo a la oficina del jefe por los últimos detalles de su objetivo, este le asignó una misión, y debía entregar (literalmente) la cabeza del líder. Sus pasos cesaron al oir una risa familiar, giró la cabeza y encontró a Chuuya sonriendo con una mujer, era la secretaria de Kōyō. Involuntariamente hizo una mueca de disgusto, pero siguió caminando.

Las personas que se cruzaban con él, notaban que estaba de peor humor (Como si fuera posible), así llegó hasta el último piso, y recogió los papeles de su próxima víctima, ese día en particular causó más destrozos. Solo tenía algo en mente, esa sonrisa tan llena de luz.

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—¿Entonces esa cosa sirve para la tos?— preguntó curioso.

—Si, la infusión de malva es bueno para personas que tosen mucho— la muchacha sonrió emocionada, por fin podía tener una plática normal con alguien dentro de las instalaciones.

—Bueno, eso fué muy útil— estiró su mano en una despedida torpe.

—Mi abuelo la bebía cuando tenía tos de perro— agrego la más alta.

—Él también es un perro— sonrió ante tal ironía.